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cultura

Juanita Escallón: “El editor es como la conciencia del autor”

Por medio de asesorías editoriales, Juanita da acompañamiento a autores que tienen la idea de hacer un libro, en la estructuración de este, retroalimentación al manuscrito, asesoramiento en la creación de la estructura del libro y tono narrativo, así como en la revisión, retroalimentación a la escritura y desarrollo del contenido.

Fotos: Ricardo Otero.

Juanita Escallón es conocida como la ‘editora de los famosos’, es periodista y durante su carrera ha trabajado como editora de libros en la editorial Planeta, donde ha editado a autores como Juan Pablo Calvás, Johana Bahamón, Daniela Vidal, Nicolás de Zubiría, Tuti Vargas, Adriana Convers, entre otros. “Desde que tengo memoria lo que más me apasiona en la vida es contar y escuchar historias”, comenta Escallón, quien además ha creado recientemente el proyecto Juanitadospuntos, donde ayuda a cientos de autores en el proceso de escribir un libro hasta autopublicarse, y con sus talleres de ‘escribir para sanar’.

Por medio de asesorías editoriales, Juanita da acompañamiento a autores que tienen la idea de hacer un libro, en la estructuración de este, retroalimentación al manuscrito, asesoramiento en la creación de la estructura del libro y tono narrativo, así como en la revisión, retroalimentación a la escritura y desarrollo del contenido.

¿Qué significa para ti la escritura?

Desde mi experiencia personal y como editora, la escritura es el mejor camino de autoconocimiento, de exploración y de comunicación que existe. A través de la escritura no solo sanas, si no que expresas lo que sientes. Desde muy pequeña escribía en diarios, en cuadernos y para mí escribir era como jugar, comer, escribir historias, es lo que siempre me ha gustado.

¿Cómo nació Juanitadospuntos?

Surgió como un accidente. En el 2019 renuncié a Planeta y me fui a vivir a Inglaterra con mi esposo. Fue una decisión muy difícil de tomar, pero ganó el amor que siento por mi pareja que iba a estudiar una maestría. Me fui con una visa de estudiante, sin permiso de trabajo, y con cero pesos ahorrados porque decidí en dos meses irme a otro país. Estando allá, mientras estudiaba inglés cuatro horas al día, empezaron a escribirme mis autores de Planeta que querían que les ayudara a editar sus libros y seguí en contacto con ellos. Creo que actualmente en Colombia hay un nicho muy grande de gente que quiere hacer un libro y las editoriales no tienen capacidad para recibir a todos los autores que quieren hacerlo.

Cuando llegó la pandemia, fue durísimo, estuvimos muy encerrados y un día me llegó la publicidad de un curso online sobre storytelling for healing (escribir para sanar). Empecé a hacerlo y todo lo que leía y escuchaba de esta profesora me hacía pensar, “todo esto es lo que me ha pasado con la experiencia como editora y con la escritura”. Me empecé a dar cuenta que todos mis autores habían vivido procesos sanadores escribiendo su libro. No importa si era Juan Pablo Calvás, que había hecho un libro de periodismo, él tuvo que enfrentar sus propios miedos al escribirlo, o si es Fat Pandora, que escribió el libro de su historia, tuvo que abrir heridas de su vida, y la escritura y escribir ese libro, les ayudó a hacerlo.

“Hay que pensar el libro en diferentes formatos, un podcast, un audiolibro, que el libro viva en otros formatos”

¿Cómo fue ese proceso de tomar la decisión?

En medio de la pandemia, leía todos los días en Instagram historias de personas que acomodaban su rutina a la nueva normalidad. El encierro y las nuevas dinámicas, junto con las clases que diariamente seguía tomando desde el mesón de mi cocina, me hicieron reflexionar del por qué no me animaba yo también a acomodar mi vida. Abrí una cuenta de Instagram, publiqué videos, y empecé a recibir muchos mensajes de personas que querían escribir un libro y autopublicarse. En seis meses ya estaba editando a siete autores que se querían autopublicar. Después de eso empezó a crecer el proyecto, volví a Colombia, y como quería hacer algo más para darle más sostenibilidad a Juanitadospuntos, creé los talleres de ‘Escribir para sanar’. En el primer año, 260 personas tomaron el taller.

El impacto de las redes sociales…

¡Sí! En 2020 era todo por Instagram, y una de las ventajas de ser la editora de los famosos, es que les conté el proyecto y todos empezaron a publicarlo. A los cuatro días ya tenía 3.000 seguidores, eso se lo agradezco infinitamente a ellos, porque todo ha sido confianza en mi trabajo. En 2021 lancé la página web con los talleres y el proyecto ha ido creciendo. Todos son autores que se quieren autopublicar, porque el modelo de las editoriales no da abasto, pero sí creo, como una enamorada de las historias y una editora que quiere seguir siéndolo por siempre, que hay muchas historias que valen la pena ser contadas, el mercado es gigante para eso.

¿Cuáles son esas historias que merecen la pena ser contadas?

Las historias que merecen la pena ser contadas, son esas historias que le pueden cambiar la vida al menos a una persona. Yo tengo un lema en mi vida y en mi trabajo y es que tu historia puede ser luz en la oscuridad de otros, y si tú te animas a contar tu historia, no tienes ni idea qué corazones estás tocando y qué vida estás cambiando. Si has transformado una vida, para mí ya ganaste, y para mí yo ya gané con mi trabajo. Mi trabajo como editora es ayudar a contar bien una historia para que tenga el poder de transformar, al menos una vida.

¿Qué debe tener en cuenta una persona que quiere ahora mismo escribir un libro?

Mi primera recomendación es tener un editor, el editor es el que te ayuda a estructurar la idea, a pensar cómo se puede potenciar esa idea. El editor es como la conciencia del autor y además de todo, el editor tiene que ser su mejor amigo, su confidente, su coach, terapeuta, su animador, porque en los procesos de escritura es muy normal que exista la frustración, que surjan preguntas como ¿para qué estoy escribiendo esto? ¿Quién me va a leer? Mi segunda recomendación, es tener un editor que ayude a pensar el libro en diferentes formatos, un podcast, un audiolibro, que el libro viva en otros formatos.

“Las historias que merecen la pena ser contadas, son esas historias que le pueden cambiar la vida al menos a una persona”

¿Cuál es el periodo de tiempo promedio para editar un libro?

Si trabajas al menos dos horas al día en tu libro, —no importa si es un trabajo de calidad o no— entre seis y ocho meses puedes tener listo un manuscrito para que empiece el trabajo de corrección y diagramación. Escribir un libro, no es ciencia cuántica, escribir un libro con un buen editor, que te acompañe bien, es terapéutico, es como ir a terapia.

¿En qué consisten los talleres de ‘Escribir para sanar’?

El taller fue diseñado para quienes quieran explorar la escritura como una herramienta de pensamiento y autodescubrimiento. Durante el taller vemos cómo la escritura, a nivel químico, realmente te ayuda a viajar información del inconsciente al consciente para que entiendas cosas… a través de un mecanismo de escritura que se llama flujos de conciencia. Está dividido en tres partes: entender cómo funciona químicamente en el cerebro el poder de la escritura, después, cómo convertir la escritura en un hábito, y cómo contar esa historia que quieres publicar. Cuando empiezas a escribir para sanar, escribes con cosas dolorosas, no es un taller de hacer terapia, si no de ejercicios de escritura. Un taller que incluye teoría y consejos prácticos para guiarte e inspirarte en el proceso de sanación y de escritura.

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