Serie: The Last of Us
Craig Mazin es considerado en estos tiempos como uno de los mejores escritores y productores del cine norteamericano. No ha sido una carrera fácil pues sus primeras incursiones en el séptimo arte fueron calificadas de mediocres por la crítica. Uno de sus mayores fracasos tuvo que ver con la cinta The Specials (2000).
Pero en juego largo siempre hay desquite. Y así ocurrió con Manzi. Fue el creador y guionista de la serie Chernobyl, que pronto se convirtió en uno de los éxitos de HBO, que al principio tuvo sus reservas de ubicarla en el horario prime.
Para redondear su trabajo Craig Mazin es el responsable de la adaptación para cine del videojuego The Last of Us que gira en torno al apocalipsis. Su estreno ocurrió en enero pasado y se hizo por la plataforma de HBO. En cuestión de días el éxito no se hizo esperar.
Más de 30 millones de espectadores la han seguido y ha logrado ponerse a la altura de The Game of Thrones, que son palabras mayores.
Ha sido una puesta en escena millonaria. Más de 150 millones de dólares en inversión, que han valido la pena con una serie cada vez más atrapante, como ocurrió con su capítulo tercero, que cuenta la historia de dos hombres supervivientes a la catástrofe, donde la vida es el hoy y no el mañana; donde el amor es una simple supervivencia. Aquí ocurre todo lo contrario: es un amor profeso entre adultos cada vez más mayores.
El comienzo de la historia se desarrolla en Austin, Texas, en el 2003. Es un comienzo caótico, apocalíptico, clave en la serie, para luego mostrar la dimensión de la catástrofe 20 años después en otro escenario que es la ciudad de Boston y cómo sobrevivir a una pandemia devastadora, causada por un hongo parásito que convierte a las personas en monstruos que llegan a brotar de la tierra.
Bella Ramsey, que a sus 11 años se unió a The Game of Thrones, le da vida a la Ellie quien asume el papel protagónico de este nuevo tráiler de zombies con apenas 17 años. Esta joven actriz inglesa ha llevado a que millones de espectadores la sigan expectantes en cada uno de los capítulos que conforman la primera temporada de la serie. Si bien Ellie que es apenas una niña de 14 años, su carácter es indomable, sobrevive a la rudeza con la que se desarrolla la vida 20 años después de la devastadora pandemia. Incluso, llega a matar para mantenerse con vida.
Pedro Pascal (Joel Miller) y Bella Ramsey (Ellie) en una escena de The Last of Us.
Uno de los grandes desafíos que afrontó la serie ha sido el de ser lo más semejante posible al videojuego que se vende por millones a nivel mundial. Los críticos han señalado que es realmente muy parecida y ha incluido a la mayoría de los personajes que conforman el juego. Pero también Mazin se ha dado libertades para darle fuerza a otros personajes a través de cada uno de sus capítulos.
El mundo devastador que muestra The Last of Us, trae al recuerdo lo que fueron esas semanas que se vivieron en la realidad de la pandemia del covid-19. Si bien no son las ciudades devastadas por los bombardeos para enfrentar a los zombies, sí es la desolación fantasmal en calles, centros comerciales, aeropuertos y la economía colapsada. Tiempos recientes que traen sombra y que no se quieren repetir.
No existen las normas, ni las leyes, cada quien sobrevive con su propia ley. Quizás la del más fuerte o la del más inteligente y sagaz como ocurre con Ellie. Es esa vida de guetos, que luchan por sobrevivir y protegerse incluso de esas comunidades que no están infectadas y han sobrevivido, pero pelean como rapiñas en busca de comida, medicamentos y con la esperanza de una vacuna.
Esta serie combina todo ese juego apocalíptico, que en un pasado reciente solo se relacionaba con la ficción, pero ahora tiene más realidad de la que nadie se esperaba. Son las nuevas realidades con las que juega el cine de ciencia ficción, donde esa delgada línea lleva al espectador entre la fantasía y la realidad. La nueva normalidad, que sigue latente sin saber por cuánto tiempo más.
