Asesoría: Gustavo Tovar Mojica, especialista en Medicina del Deporte
Participar en una competencia atlética sea una carrera recreativa que tanto proliferan actualmente por todo el país o una media maratón, es una experiencia muy agradable y es una forma de familiarizarse con el ejercicio, pero cuando ocurren hechos como el del pasado 4 de septiembre durante la Maratón de Medellín, en el que un participante perdió la vida, lo deportivo pasa a un segundo plano y es ahí cuando muchos se preguntan, si es bueno participar en este tipo de pruebas.
Jorge Andrei Valencia García era un ingeniero financiero de 35 años que lamentablemente falleció en la pasada edición de la maratón de la capital antioqueña, donde competía en la modalidad de los 21 kilómetros y quien sufrió un paro cardio respiratorio, cuando pasaba por la calle San Juan y la Avenida del Ferrocarril. De inmediato fue atendido por un grupo médico del evento que le brindó atención prehospitalaria.
Según un comunicado emitido por la organización del evento, el paciente fue atendido por una ambulancia básica de la Policía Nacional que se encontraba en el sitio y segundos después se les unió una ambulancia medicalizada del Grupo Vigías, que aplicó al paciente maniobras de reanimación avanzada, consistente en masajes y aplicación del DEA, Desfibrilador Externo Automático, y decidieron trasladarlo al Hospital General de Medellín.
En el trayecto el personal médico continuó aplicando las maniobras de reanimación hasta entregarlo al personal médico de Hospital General, quienes lo ingresaron a la sala de reanimación y continuaron con las maniobras, pero lamentablemente el paciente no respondió y minutos después fue declarado su fallecimiento.
Esta no es la primera vez que ocurre un deceso durante el desarrollo de la Maratón de Medellín. En el 2018, un docente de periodismo de la Universidad de Antioquia, Juan Camilo Arboleda, sufrió un desmayo al llegar a la meta de los 21 km.
Una evaluación médica es clave antes de competir en carreras de fondo
Importancia de una preparación
Ahora bien, no se trata de satanizar este tipo de eventos, el llamado a quienes piensen correr, ahora que se reactivaron estas competencias, es que se preparen adecuadamente y no se tomen estas pruebas tan a la ligera, pues independientemente de la versión que se escoja, 5K, 10K, media maratón o maratón completa, siempre va existir de por medio un esfuerzo físico importante que implica una serie de riesgos, que deben minimizarse con una adecuada preparación.
Según el doctor Gustavo Tovar, especialista en Medicina del Deporte, en todo tipo de actividad física existen principalmente dos clases de riesgos, las lesiones de tipo cardiocerebrovascular y las osteomusculares, las cuales pueden presentarse a nivel de tejido, hueso, cartílago, ligamento, músculo o tendón. “Una persona sedentaria por ejemplo, en una actividad exigente como podría llegar a ser una carrera, si no se viene entrenando, tiene 100 veces más de probabilidad de presentar un infarto, un problema cerebrovascular, el rompimiento de una arteria, un desagarro, una luxación, un esguince, una fractura u otro tipo de lesión, porque sencillamente el cuerpo no está preparado para ejecutar un ejercicio a tal intensidad” asegura el doctor Tovar.
“El ejercicio es salud y es bueno para todos, pero cuando se trata de exigir el cuerpo más de lo acostumbrado es necesario contar con la orientación de profesionales de la salud y la actividad física”
Una de las recomendaciones del experto antes de aventurarse a correr, es prepararse y entrenar para la carrera que va a realizar con el tiempo suficiente para lograr las adaptaciones físicas que le permitan disminuir los riesgos y en lo posible tener una valoración médica, ojalá por un especialista en Medicina del Deporte. Para precisamente valorar el riesgo que tiene cada persona de sufrir alguno de estos eventos, ya sea de la parte cardiovascular u osteomuscular. El objetivo es poder orientar a los pacientes para que logren disminuir al máximo cualquier tipo de riesgo durante el ejercicio, y para ello es necesario evaluar la presión arterial, los niveles de colesterol, de azúcar, antecedentes de infarto o si fuma. Por ejemplo, en el caso de los adultos jóvenes y adultos mayores, es decir personas por encima de los 35 o 40 años, se sabe que cuando tienen eventos cardiovasculares hay un mayor riesgo de enfermedad coronaria. Al investigar los factores que pueden llegar a enfermar y luego intervenirlos, se logra prevenir una serie de riesgos entre ellos el de muerte súbita.
Lo mismo sucede con la parte osteomuscular, hay que hacer exámenes para evaluar los músculos, la condición física e identificar lesiones previas de ese individuo, si tienen problemas a nivel de articulaciones, si tienen desgastes o lesiones. De tal manera que se pueda determinar si el evento al que se van a presentar, les puede empeorar o no, alguna condición.
¿Con cuánto tiempo de anticipación hay que prepararse?
Dice el doctor Tovar, que los tiempos son relativos porque están sujetos al nivel de acondicionamiento de cada individuo. En el caso de alguien sedentario, que la mayor parte del día trabaja sentado, y desea correr una media maratón, debe preparase en promedio por lo menos con un año de anticipación o si es una maratón completa, por lo menos con dos años de antelación. El cuerpo hay que llevarlo lentamente para que se vaya adaptando a las cargas de trabajo que se pretenden. Hay que conocer los propios límites, y bajo ninguna circunstancia sobreexigir el organismo más allá de lo que se viene haciendo en los entrenamientos.
Los relojes deportivos ayudan a controlar el esfuerzo físico
Cuestionario de aptitud
Lo ideal es que este tipo de carreras por lo menos realicen un PAR-Q (cuestionario de aptitud para la actividad física) en el que se interrogue a los participantes sobre si tienen dolor en el pecho, si se han desmayado, si toman algún medicamento cardiovascular, si tienen alguna lesión osteomuscular delicada o si tienen alguna condición que consideren pueda aumentar el riesgo de enfermar. En caso de que la respuesta sea positiva a alguna de estas preguntas, lo más prudente será acudir al médico antes de someterse a la exigencia de una competencia.
Por otro lado, quienes ya vienen corriendo con regularidad, es importante que también incluyan dentro de su entrenamiento, ejercicios para mejorar su fuerza, flexibilidad, resistencia y demás capacidades físicas básicas.
Orientación por un profesional
Vale la pena que toda preparación esté orientada por un profesional médico, ojalá por un especialista en Medicina del Deporte, quienes son los más indicados para manejar las situaciones de riesgo relacionadas con el ejercicio, de no ser posible por lo menos acudir a una consulta con un médico general y apoyarse en los entrenadores deportivos y físicos que les ayuden también a mejorar la técnica y a planear los entrenamientos.
El ejercicio es salud y es bueno para todos, pero cuando se trata de exigir el cuerpo más de lo acostumbrado es necesario contar con la orientación de profesionales de la salud y la actividad física.
Si son personas que no están acostumbradas a ejercitarse claro que pueden proponerse participar en una carrera atlética, pero con una preparación adecuada, comenzar con ejercicios no tan fuertes y darle el tiempo al cuerpo para que paulatinamente se vaya acondicionando y mejorando sus condiciones. Por otro lado, quienes ya vienen corriendo con regularidad, es importante que también incluyan dentro de su entrenamiento, ejercicios para mejorar su fuerza, flexibilidad, resistencia y demás capacidades físicas básicas.
