Viernes, 19 de abril de 2024
Suscríbase
Viernes, 19 de abril de 2024
Suscríbase
Psicología

Psicología del mal-estar

Por Miguel de ZubiríaDirector del Instituto de la Soledad ¿Qué […]

Psicología del mal-estar

Por Miguel de Zubiría
Director del Instituto de la Soledad

¿Qué elección tomarías en una fiesta aburrida, tediosa? Muy pronto querrás irte de la fiesta, abandonarla. El problema es cuando esa fiesta es nuestra propia vida, la de un joven, de un niño o de un viejo.

¿Y si no solo es aburrida (IN-feliz), sino además hay tensiones, problemas, más aún disputas? Muchas más ganas tendríamos de escapar, por supuesto. Les ocurre a los jóvenes infelices y peor a quienes sufren, en su caso no es una fiesta de fin de semana, sino la de todos los días y noches, sin escapatoria posible. Llega un momento cuando parece ser la única opción la de abandonar definitivamente la fiesta.

Los suicidas nos ayudan a entender la felicidad, y los felices a entender el suicidio. Los suicidas carecen de felicidades. Nuestra labor como psicólogos es identificar cuál de las seis felicidades falla en cada joven, y sobre todo identificar sus fuentes de sufrimiento, pues estas parecen disparar el mecanismo, desde sus vagos sentimientos pesimistas perdurables, luego las ideas y planes de acabar con la propia existencia para dejar su vida infeliz y de sufrimiento, hasta cuando aparecen los intentos.

Psicología del bienestar y el malestar

Simplificando las cosas, diremos que no hay una sola fiesta, sino al menos tres. Unos son o llevan vidas felices, otros infelices y otros atraviesan dolorosos y prolongados períodos de sufrimiento. Los jóvenes del grupo unos son felices. Están-BIEN con ellos mismos, con los otros y con el mundo o con sus actividades: disfrutan de un pleno bien-ESTAR.

Felicidad perdurable, a secas

Se levantan cada día con varias metas, sueños, deseos, proyectos. Se autovaloran, estiman sus cualidades humanas, se consideran personas valiosas. Poseen cercanas relaciones y vínculos con su padre, madre, hermanos, vecinos, compañeros, amigos, ¡y hasta tienen novi@!, lo cual llena de gratos sentimientos positivos su día a día, lleno de entusiasmo, optimismo y esperanza. Para completar su buena madera psicológica, aprendieron a enfrentar las tensiones, conflictos, problemas, sin dejarse hundir por estos, son resilientes. Y por supuesto, gozan la vida, se autoconocen y saben qué quieren y para dónde van. Disfrutan las seis felicidades fundamentales. Delicioso.

Es la cara positiva de la buena vida. Aunque por diversas razones algunas de las seis felicidades no operan bien. En tal caso, hablamos de seis posibles infelicidades, cada una con su respectivo nombre. Origen del grupo dos de jóvenes, los muchachos IN-felices.

Sin metas o con pocas, escasos de sueños, deseos, anhelos, ocurre la apatía, que afecta a millones de muchachos en el mundo. La autodevaluación no requiere mayor explicación, pero sí entender qué significa vivir, irremediablemente, con quien no es digno de valor, brillante, valioso: ¡uno mismo!

Psicología del mal-estar

En ascenso sostenido mundialmente y sin regreso, la soledad podría ser la más extensa y dolorosa forma de infelicidad, pues pocos otros o ninguno desean compartir sus tiempos, ni relatos, ni afectos con este joven. La madre Teresa de Calcuta, la considera la forma extrema de infelicidad, “el sentir que nadie nos necesita”.

Similar, la cuarta infelicidad emocional ocurre al sumar escasos sentimientos positivos diarios, de alegría, optimismo, esperanza, o por sus contrapartes: angustia, tristeza, ansiedad… la infelicidad emocional.

La no placidez introduce al joven en un mundo de tensiones, sufrimientos, malestares. Y posiblemente, la peor de todas las infelicidades: la falta de sentidos de vida, de proyectos valiosos. Cualquiera de estos muchachos participa de una fiesta aburrida, arman el grupo dos, siguiendo con la analogía.

Nos resta considerar al grupo tres, son muchachos que viven un infierno, a causa de la presencia no de una, sino de varias infelicidades yuxtapuestas. Se les denomina trastornos mentales. Entre ellos, los comunes, depresión, trastorno de ansiedad, las diversas enfermedades mentales, y el proceso suicida, con el cual iniciamos. Su situación es aterradora. Estos jóvenes y sus familias están en continuo sufrimiento.

¿Si se fuera la luz por varias horas, meses en nuestro caso…? Depende del muchacho, si pertenece al grupo uno, dos o tres.

Con sorpresa hemos encontrado muchachos que hoy están mejor que antes de la pandemia. En efecto han aprovechado este apagón vital para concentrarse en realizar sus metas destinando mayor tiempo a ellas, en conocerse, en perfeccionar sus mecanismos psicológicos. Salen favorecidos, quien lo iba a pensar.

El grupo dos es más complicado, pero podríamos decir que su reto principal, donde pueden hacer mucho los psicólogos, consiste en impedir caer al grupo tres. Impedir que su infelicidad desinfle los pocos puntos de soporte psicológico, o sus salvavidas desinflados. De este segundo grupo unos se mantienen mediante una cruda lucha diaria, otros caen y desarrollan un franco trastorno.

En suma, los impactos de la pandemia dependen fundamentalmente del balance de felicidades o infelicidades del joven, a las cuales deberían prestar especialísima atención sus padres y profesores, lo cual no ocurre.

Psicología del mal-estar

Seis preguntas fundamentales

Lo bueno es que hoy podemos medir y cuantificar la felicidad, no una sino seis, las varias infelicidades y las diversas formas de sufrimiento. A modo indicativo seis preguntas para tus hijos o estudiantes. Califica de 0 (nada) hasta diez (totalmente) estas preguntas iniciales sobre tus hijos o estudiantes.

  1. Para los próximos días o semanas tienen gratas metas o planes por desarrollar.
  2. Se consideran jóvenes con muchas cualidades.
  3. Las relaciones y vínculos con sus personas cercanas operan magníficamente.
  4. Todos los días disfrutan de sentimientos y emociones positivas.
  5. Están preparados para enfrentar las dificultades y tensiones incrementadas en esta pandemia.
  6. Saben para dónde van y les encanta vivir.

¡Alégrate!

Con sorpresa hemos encontrado muchachos que hoy están mejor que antes de la pandemia. En efecto han aprovechado este apagón vital para concentrarse en realizar sus metas destinando mayor tiempo a ellas.

vida sana, ejercicio Vida sana

La feria vida sana: Nutrición, bienestar y consciencia en un solo lugar


agujeros negros

Un tornado cuántico abre la puerta a comprender los agujeros negros


Dolce & Gabbana

Dolce & Gabbana abre su nuevo piso dedicado a la Generación Z en la boutique Andino de Bogotá