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Los Coletazos de Supermartes

Por Víctor G RicardoAnalista político, ex-comisionado de paz Por algo […]

Los Coletazos de Supermartes

Los Coletazos de Supermartes

Por Víctor G Ricardo
Analista político, ex-comisionado de paz

Por algo lo llaman ‘supermartes’. Con esta frase, Joe Biden resumió la sorpresa de los resultados de las primarias celebradas el martes 3 de marzo en 14 estados en los que el ex-vicepresidente Biden se impuso en 10 de ellos. De los 1.357 compromisarios en juego ese martes, el 34% del total, Biden se llevó 380 frente a los 328 alcanzados por Sanders. Más o menos previsible era su victoria en los estados del Sur, pero los de Texas, Massachusetts, Virginia o Minnesota sucedieron de forma inesperada.

El ‘supermartes’ estaba predestinado a coronar a un Sanders imparable en las encuestas. Sin embargo, las primarias llevadas a cabo en Carolina del Sur en las que Biden se impuso con autoridad, supusieron una revolución en el partido demócrata con la retirada, ante los malos resultados cosechados, de Buttigieg y Klobuchar, lo que permitió aglutinar en torno a la figura de Biden el voto demócrata moderado.

Biden también debe su victoria al apoyo recibido por parte del voto afroamericano que, en estados como Alabama, supone el 50% del electorado. El voto latino se decantó, sin embargo, por Sanders, como se pudo constatar en Texas y, especialmente en California, lo que demuestra el efecto arrastre de la plataforma progresista que encarna Sanders. De hecho, su victoria en California, considerada la joya de la corona por el número de compromisarios que aporta, ha supuesto un fuerte espaldarazo en sus aspiraciones en la carrera presidencial.

Tras la retirada de Bloomberg y de Warren, la pugna demócrata se ha convertido, por tanto, en un duelo de dos. Se trata de dos viejos conocidos de la política norteamericana, de edad aproximada, 77 y 78 años. Es la tercera vez que Biden se presenta a candidato a presidente frente a dos de Sanders. Biden representa una suerte de antihéroe, varón, blanco, católico, sin golpes de efecto en la era de las redes sociales. Sanders, por su parte, encarna el espíritu socialista, independiente y heterodoxo, contrario al establishment político y corporativo que representa Biden.

Ahora corresponde al partido demócrata decidir si está preparado y quiere dar, en estos momentos, el giro a la izquierda que representa Sanders y si esta es la mejor vía para recuperar los votos necesarios para imponerse a Trump en el mes de noviembre. Las primarias irán perfilando las posibilidades de uno y otro de cara a la gran convención demócrata del mes de julio. Muchas de ellas tendrán lugar en estados del sur por lo que, a priori, y por los resultados del ‘supermartes’, situaría a Biden en una situación de ventaja.

los coletazos de supermartes

Los Coletazos de Supermartes

Otra incógnita es qué pasará en las primarias del decisivo estado de la Florida, donde el voto latino tiene una especial trascendencia (podría beneficiar a Sanders), pero no parece seguir la misma línea de comportamiento que en California. En Florida, como es sabido, la política exterior de Estados Unidos hacia Cuba y Venezuela se entiende, desde hace tiempo, en clave de política interna. Siendo así, es probable que a Sanders le pasen factura sus recientes declaraciones a favor del sistema educativo cubano.

Por el momento, Biden parece perfilarse como el candidato preferido del aparato demócrata. Ha recibido el respaldo de muchos de sus anteriores contrincantes en estas primarias (los últimos los del propio Bloomberg, que se habría gastado de su propio bolsillo 500 millones de dólares en la campaña, y la senadora californiana Kamala Harris). Por cierto que esta última aparece en varias encuestas como fórmula presidencial de Biden. La excandidata a la carrera presidencial Elizabeth Warren aún no se ha pronunciado sobre a quién apoyará. Biden, mientras tanto, ha optado por un discurso unificador en torno a su persona, como la figura mejor situada para poder arrebatar el voto en aquellos distritos que resultaron decisivos en la victoria de Trump en 2016.

Claro está que hoy en día el coronavirus ha incursionado no solamente en la salud de los norteamericanos sino también en la política. Son muchas las críticas al presidente Trump por el manejo que le ha dado a esta pandemia, lo que lo podría afectar en su candidatura a la reelección, tema que no lo tenía previsto y puede causar mucha influencia en la decisión final del voto en los Estados Unidos.

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