La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, solicitó este jueves al Congreso de Estados Unidos agilizar de manera «urgente» la aprobación de la financiación adicional para Ucrania que ha solicitado el presidente de EEUU, Joe Biden, por valor de 33.000 millones de dólares, los cuales se destinarían a asistencia en materia de seguridad, económica y humanitaria.
«Para seguir ayudándoles, asegurándonos de que tienen las armas que necesitan, la artillería que necesitan, el equipo que necesitan, es urgente avanzar en esta financiación», señaló Psaki en rueda de prensa. Psaki resaltó que aún falta por asignar la partida de 250 millones de dólares que aprobó el Congreso de Estados Unidos y dijo: «obviamente trabajaremos para acelerar eso».
La portavoz no ha querido ofrecer fechas concretas sobre cuándo esperan que se apruebe la partida, pero señaló que «definitivamente hay una urgencia para conseguir esta financiación».
Asimismo, Psaki ha instado a otros países a seguir brindando ayuda a Ucrania. «Esperamos que sigan dando un paso adelante también, ya que esto va a ser un esfuerzo sostenido, una guerra más larga, como hemos hablado antes. Vamos a necesitar que otros países sigan prestando una serie de ayudas», ha afirmado.
En este sentido, resaltó el anuncio de Alemania de enviar carros blindados a Ucrania porque ha dicho que es «algo que nunca han hecho antes».
Así, la portavoz ha recalcado que el plan de EEUU para Ucrania «es seguir proporcionando una serie de ayudas militares y de seguridad, como demuestra el paquete que el presidente ha propuesto y presentado este jueves en el Capitolio; para reforzar su mano en la mesa de negociaciones; y para garantizar que cuentan con el apoyo y el respaldo de Estados Unidos y del mundo».
Además, ha destacado la importancia de los fondos para ayuda humanitaria por «los millones de refugiados, millones de personas que se han quedado sin hogar, o que ya no están en sus casas como resultado de esta guerra».
De los 33.000 millones de dólares solicitados este jueves por la Administración de Joe Biden, 20.400 irían destinados a proporcionar a Kiev ayuda militar y en materia de seguridad, mientras que 8.500 irían a parar al Gobierno ucraniano y 3.000 millones serían para asistencia humanitaria adicional.
