«Si Fedegán cumple su palabra y tenemos los recursos en el presupuesto para comprar la tierra ya, y que todo este Gobierno se dedique durante estos años a eso, podemos hacer una reforma agraria», dijo el jefe de Estado en la población de Mosquera (centro) al presentar un programa para que el campesino tenga acceso a la oferta de servicios del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA).
El Gobierno colombiano y la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán) firmaron en octubre pasado un acuerdo marco para la compraventa de tres millones de hectáreas de tierras que serán destinadas a la reforma agraria.
Los ganaderos son de los mayores propietarios de grandes extensiones de tierra en Colombia y aseguran que nunca han estado en contra del derecho del campesino a la tierra.
En la presentación de CampeSENA, el presidente Petro aseguró que la entrega de tierras a los campesinos significa cumplir con el primer punto del acuerdo de paz firmado en 2016 entre el Gobierno colombiano y las FARC.
«El primer punto del acuerdo de paz con las FARC dice que se entregarán 3 millones de hectáreas de tierras a campesinas y campesinos, y que se titularán 7 millones de hectáreas allí, donde están las campesinas y los campesinos», indicó.
Del mismo modo, el mandatario afirmó que el desarrollo de este acuerdo es un compromiso del Estado para la paz.
«A partir de esa mala, aberrante e irracional distribución de la tierra es que hemos tenido violencia, no solamente por las FARC, sino desde antes», apostilló.
Asimismo, hizo referencia a la necesidad de llevar las energías limpias y la conectividad comunitaria a las zonas campesinas del país de la mano con el SENA, la escuela de artes y oficios del país.
