En la década de los 80, el genial músico venezolano Alberto Slezynger, que venía de estudiar en la reconocida universidad norteamericana Berklee College of Music, organizó a un grupo de excelentes instrumentistas de su país para fundar la recordada banda Daiquirí.
En 1983 lanzan el álbum que los dispararía a la fama en el mercado de música latina internacional: “Puro deseo de amar”. Por más de una década venezolanos, colombianos, panameños y millones de latinos en el resto del continente disfrutaron y bailaron con sus principales éxitos.
“La Casa del Ritmo”, “Chamo Candela”, “Caribeña”, “Morir de amor”, “Agua que no has de beber” o “Caso perdido”. Slezynger apareció en el mercado paralelamente a grandes como Franco de Vita y Yordano, otros geniales músicos que recorrieron un camino similar. Ellos, por supuesto como millones del vecino país, decidieron radicarse en el exterior. A Estados Unidos en la ciudad de Miami llega Slezynger para crear en 1996 la empresa "Personal Music" creadora de composición de material musical, grabación, producción y diseño de sonido. Hoy todavía es su director general.
Hace algunos años tuve la oportunidad de entrevistar a Slezynger en Bogotá, quien todavía hace giras específicas a diferentes latitudes haciendo sonar las mejores épocas de su recordada Venezuela. Cuando llega a cualquier parte mágicamente aparecen los grupos de venezolanos migrantes que lo buscan con nostalgia. Su historia representa la de millones de ciudadanos que salieron y nunca volvieron.
El esplendor de ese país se apagó rápidamente con la llegada de Hugo Chávez al poder en 1999. En pocos años Venezuela destruyó su economía. Según José Manuel Puente, profesor titular del Centro de Políticas Públicas del Instituto de Estudios Superiores de Administración de Venezuela en el año 2020, de acuerdo con la estimación del Fondo Monetario Internacional, el Producto Interno Bruto de Venezuela cayó un dramático 30%. Con esta demoledora cifra se cerró un ciclo de una pérdida cercana al 75% del PIB total entre 2014 y 2020. Este resultado representa el peor desempeño macroeconómico en magnitud y duración en toda la historia de Venezuela, el peor de cualquier país de América Latina y el mundo en el período comprendido entre 1980 y 2020. Maduro defiende la posición de su gobierno adjudicando estás caídas a las sanciones económicas internacionales.
La población se terminó de polarizar a nivel políticoy los opositores como Leopoldo López o Juan Guaidó han sido demolidos por las diferentes formas de lucha que usa el gobierno. Los colombianos hemos visto de cerca el resultado de esa dolorosa destrucción. Las cifras oficiales de migración Colombia son miedosas. Hoy en Venezuela se podría dar, ojalá, un cambio que vienen esperando millones de hermanos del vecino país. La oposición venezolana busca ponerle fin a los 25 años de chavismo derrotando a Maduro en las elecciones de esta jornada. Nada fácil, teniendo en cuenta que hay serios cuestionamientos sobre el tema de institucionalidad que nadie puede dejar de incluir en el análisis.
Si fuera por lo que dicen las elecciones,Edmundo González tiene la ventaja. La líder de la oposición María Corina Machado quien no pudo inscribir su candidatura se ha unido a apoyar a González. No son sólo las encuestas, las multitudes en las calles de las diferentes ciudades han sido demoledoras. Los resultados se podrían conocer hoy mismo a altas horas de la noche.
Hay instalados 15.000 puestos de votación en todo el país disponibles desde las 6 de la mañana y hasta las 6 de la tarde. Se encuentran registrados y habilitados aproximadamente 21 millones de personas. Una mezcla de esperanza y escepticismo ronda el ambiente. Sin duda millones quieren que hoy llegue este nuevo Chamo Candela a dirigir la Casa del Ritmo.
