El Ecuador parece estar a un paso de salirse de control ante una crisis de seguridad sin precedentes, protagonizada por grupos narco delictivos.
Desde la noche del lunes 8 de enero de 2024, el país vive una espiral de violencia jamás vista en el pasado. En un lapso de 12 horas, noticieros y redes sociales reproducen escenas propias de una película de ciencia ficción.
Policías secuestrados, patrulleros detonados, coches bombas accionados, explosiones de puentes peatonales, buses escolares incinerados, fuga de reos, guías penitenciarios retenidos, falta de control del Estado en las prisiones y hasta el asalto a un canal de televisión.
En medio de este escenario queda en entredicho el liderazgo político del joven Presidente de la República, Daniel Noboa (36 años), quien heredó un país en crisis hace solo 47 días, pero que tampoco ha sido capaz de capitanear a la Nación para sacarla de esta tormenta de inseguridad.
El 'florero de Llorente' que disparó esta crisis fue la fuga del prisionero más peligroso del país: Adolfo Macías alias 'Fito', líder de la banda de los Choneros y que "purgaba" su condena de 34 años en la cárcel regional de Guayaquil. "Purgaba" -entre comillas- porque en realidad disfrutaba de todas las comodidades y facilidades en una prisión que, como era de conocimiento público, él mismo controlaba.
Para vergüenza del Estado ecuatoriano, la fuga fue descubierta recién la mañana del domingo 7 de enero de 2024, sin que sus autoridades puedan determinar hasta el momento la fecha exacta del escape.
La Ministra del Interior, Mónica Palencia, dijo hoy en una entrevista con un medio extranjero que no ha sido posible determinar con exactitud el día que el reo decidió irse. Lo desconcertante de la falta de datos oficiales es que otros políticos sí tienen claridad sobre el tema. Ese es el caso de José Serrano, exministro del Interior correísta, quien con frecuencia comparte información delictiva de primera mano, quien reveló que la escapatoria se registró en plena Navidad, el 25 de diciembre de 2023.
El Gobierno de Noboa reaccionó golpeándose contra las paredes. Primero anunció para la noche de ese domingo a una Cadena Nacional para informar de acciones supuestamente contundentes, pero finalmente fue cancelado, sin ningún anuncio sustancial.
Y la tarde del lunes 8 de enero, a través de un video de un minuto con 19 segundos, el presidente Noboa anunció un Decreto de Excepción para tomar el control de las cárceles acompañado de un toque de queda en todo el territorio nacional, de 23:00 a 05:00.
"¿Utilizar a las FF.AA. en tareas de seguridad ciudadana, decretar estados de excepción y disponer toques de queda, no se les ocurre algo un poquito más novedoso? Misma receta de siempre", escribió el penalista y analista político Ramiro García Falconí.
El gobierno del expresidente Lasso firmó entre 2021 y 2023 al menos 13 estados de excepción por los problemas de inseguridad, sin que se haya podido contener el problema. Al contrario, el Ecuador cerró el año pasado como el país más violento del hemisferio con 40 asesinatos por cada 100 mil habitantes.
Por paradójico que parezca, la espiral de ataques que han sembrado el terror en la población empezó sin control precisamente durante el toque de queda. En Machala, ciudad costera en el sur del país, tres policías fueron plagiados y horas más tarde se difundió un video de los uniformados sometidos leyendo un mensaje amenazante de los grupos criminales contra el Estado ecuatoriano.
En Cuenca, en la zona austral, 39 guías penitenciarios están retenidos en la cárcel de Turi. En la zona norte, el suboficial de la Policía Nacional, Alberto Gómez, fue secuestrado y leyó un mensaje pidiendo ayuda al Presidente de la República. En la misma capital, un puente peatonal fue atacado en horas de la madrugada y en otros puntos de la urbe fueron destruidos vehículos particulares.
La tónica fue similar en Guayaquil. Allí cuatro ocupantes de una moto incendiaron un bus escolar y una unidad de policía fue objeto de un ataque con explosivos.
Casi en simultáneo a estas acciones terroristas se dio una segunda fuga de 32 reos, esta vez de la cárcel de la andina ciudad de Riobamba. En ese grupo de prófugos está Fabricio Colón Pico, alias ‘Capitán Pico’, quien fue señalado por la Fiscal General del Estado, Diana Salazar Méndez, por haber sido contratado para asesinarla, luego de las revelaciones que el Ministerio Público hizo sobre las infiltraciones de los narcos con la política.
Y la cereza del pastel ocurrió pasado el mediodía de hoy, cuando encapuchados armados ingresaron a las instalaciones del canal TC Televisión y sometieron a su personal, según reportó la cuenta @EmergenciasEc. En una transmisión en vivo en Facebook se escucharon disparos y gritos de desesperación del personal sometido. Hasta el momento no hay información oficial sobre la situación de la estación televisiva.
“Es claro que existe una cooptación del crimen organizado en el sistema penitenciario (…) ya se conocía que el principal problema del país son las prisiones”, sostiene Christian Zurita, excandidato presidencial que reemplazó al asesinado postulante Fernando Villavicencio, quien agrega que el Presidente debe buscar respaldo en la sociedad democrática e institucional y no en grupos políticos relacionados con el narco.
Pasadas las 15:00, el Presidente declaró el estado de "conflicto interno armado", catalogó como terroristas a 21 grupos criminales y ordenó a las Fuerzas Armadas ejecutar operaciones militares, bajo el derecho internacional humanitario y respetando los derechos humanos, para neutralizar a los grupos identificados.