Por Álvaro Rodríguez Ferrero
Cofundador de Innside y creador del podcast “Boss Tank: ser tu propio jefe”. @alvarorodriguezf
Nicolás Loaiza y Gigliola Aycardi, dos universitarios de la Universidad de los Andes apasionados por el deporte empezaron este proyecto en el año 1998 al darse cuenta de la alta demanda y baja oferta de centros deportivos en el país. Después de que la facultad de Ingeniería Industrial les aprobara la materia de Salud y Deporte se involucraron de lleno con la idea de construir el centro de salud y bienestar más grande de Colombia: los gimnasios Bodytech.
En una época en la que los lugares de acondicionamiento físico no superaban los 60 metros cuadrados, Nicolás y Gigliola soñaron con crear un espacio de 800 metros dedicado a la salud, el bienestar y el deporte.
El proyecto, que además fue su tesis de grado, empezó a materializarse cuando los dos futuros socios iniciaron un riguroso estudio de mercado el cual tuvo su punto de partida con el conteo de todos los vehículos que transitaban por la carrera séptima en la ciudad de Bogotá; lo anterior con el fin de entender la necesidad de construir más de una sede basándose en la dificultad de movilidad que se presentaba en la capital.
Además entrenaron en todos los gimnasios de Bogotá sin importar su tamaño, ubicación o perfil social, entrevistaron personas con diferentes edades para entender cómo veían el acondicionamiento físico y así poder tener datos cuantitativos, se plantearon todos los escenarios posibles; desde el más pesimista hasta el más optimista descubriendo que por mal que se desempeñara el negocio lograrían como mínimo 500 afiliados en el transcurso de seis meses.
Tocaron las puertas en diferentes entidades financieras, recibiendo muchos “no” como respuesta. Los bancos justificaron su negativa basándose en la edad de los solicitantes, en su poca experiencia y sobre todo en la incertidumbre que generaba el proyecto.
Finalmente el Fondo Nacional de Garantías se comprometió en otorgar el 50 % de los recursos necesarios para el nuevo negocio. Ahora el nuevo reto era conseguir el 50 % restante, para lo cual debieron acudir a sus ahorros e incluso a la hipoteca de inmuebles familiares.
“Después de que el Fondo Nacional de Garantías nos diera el aval de la mitad de la inversión, vendimos nuestros carros, reunimos nuestros ahorros y en mi caso puntual, mi mamá hipotecó nuestro apartamento para prestarme el dinero”, recuerda Gigliola Aycardi, cofundadora de Bodytech.
Los dos futuros empresarios decidieron “lanzarse al agua” aun sabiendo que si las cosas no funcionaban debían trabajar por más de 20 años para pagar las deudas adquiridas sin nisiquiera haber comenzado el proyecto.
La tecnología fue un aliado en este emprendimiento, la contratación de personal idóneo, la investigación profunda en temas de nutrición, bienestar y calidad de vida, llevó a Bodytech a diferenciarse de otros negocios con el mismo tipo de servicios.
“Yo no soy millennial pero siento que lo parezco un poco ya que nunca duré más de un año en ningún trabajo, siempre sentía que sabía más que mi jefe o quería que me nombraran gerente en seis meses y esa no es la realidad”, comenta Aycardi.
Cuando todo parecía estar saliendo a conformidad y las proyecciones eran bastante optimistas, llegó el Covid-19 a modificar el rumbo de los proyectos, no solo de esta empresa sino de muchas más que con el tiempo venían estabilizándose y convirtiéndose en importantes fuentes de empleo en el país.
Bodytech cerró sus puertas el 16 de marzo en los tres países donde está operando (Colombia, Chile y Perú), pasando de tener un crecimiento sostenido a no facturar ningún servicio en los 120 días que lleva con sus instalaciones físicas cerradas.
Después de tomar todas las medidas legales y financieras como vacaciones colectivas, disminución de horarios y de salarios; la caja de la compañía se acabó y se dio inicio a la difícil labor de terminar y suspender contratos de trabajo, pasando de tener una planta con 2.200 colaboradores activos, a una de 200 empleados en menos de tres meses.
Hoy, a través de distintos métodos y alivios, los socios de Bodytech han procurado mantener en pie su negocio acudiendo a la congelación de los arriendos de sus sedes, créditos financieros y el cierre definitivo de algunos locales pero esperan que así como fue la caída económica, así mismo de rápido se dé la recuperación; pues los cálculos iniciales, en tiempo, para volver a la facturación de marzo son de más de ocho meses a partir de su reapertura. Para Gigliola “esta pandemia refleja el Darwinismo, donde solo los más fuertes podrán sobrevivir, sin embargo hay una gran esperanza estadística, ya que Colombia apenas tiene un porcentaje del 3 % de penetración de personas que van al gimnasio, basándonos en que países como Argentina, Brasil y México tienen más de un 6 % de penetración en el ámbito deportivo, podríamos afirmar que este mercado a crecido, se ha posicionado en América Latina y perdurará por más tiempo”.
Para visitar las sedes de Bodytech será obligatorio hacerlo a través de una cita digital, los ingresos para hacer deporte se realizarán con códigos QR y los clientes deberán contestar una serie de cuestionarios sobre salud. En cada sede se tomará la temperatura al ingreso y se entregará un kit de cuidado personal para hacerle frente al Covid-19.
Dentro de las instalaciones se realizará periódicamente una limpieza minuciosa de cada una de las máquinas antes y después del entrenamiento. Se mantendrá una distancia social de dos metros entre cada persona y será obligatorio el uso de tapabocas para todo el personal que esté dentro de Bodytech.
Así se inicia una nueva etapa de servicio en uno de los negocios de gimnasios más emblemáticos del país. El trabajo de muchos años, como la experiencia de sus socios y empleados, será la garantía para que los usuarios puedan realizar sus rutinas de entrenamiento bajo las más estrictas medidas de bioseguridad.
Los socios de este emprendimiento Endeavor, le envían un mensaje a los integrantes de los sectores económicos más afectados que son los de recreación, ocio y deporte: “perseveren, sean resilientes; así suene cliché el término de “reinventarse” o “pensar distinto”, hemos visto casos donde restaurantes se vuelven mini mercados o casos de negocios como el nuestro, donde sus servicios se volvieron virtuales 100 %, ahorrando costos operativos, generando empleos y optimizando todos los procesos internos”, puntualiza Gigliola Aycardi.
Bodytech es una Institución prestadora de servicios de salud (IPS), con servicios habilitados y calificados en medicina deportiva, nutrición y fisioterapia, certificados y vigilados por la Superintendencia de Salud. Tiene presencia en Colombia, Perú y Chile. Cuenta con más 170 sedes, 300.000 afiliados y alrededor de 4.000 profesionales en salud deportiva.
