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Bogotá, 30 ago (EFE).- La Fiscalía colombiana asumió la investigación para establecer responsabilidades por las cuales el narcotraficante Francisco Javier Zuluaga, alias «Gordo Lindo», quedó en libertad pese a que está vinculado con procesos de narcotráfico.
Zuluaga salió de la cárcel La Picota, de Bogotá, el pasado 26 de agosto, pese a que tiene deudas pendientes con la Justicia, por lo cual, un fiscal anticorrupción «asumió la investigación por los presuntos actos ilícitos detectados en la libertad».
Por su lado, el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC) ha dicho que, al momento de verificar todos los procesos contra «Gordo Lindo», nunca les apareció en su registro la medida de aseguramiento, que estaría vigente desde 2018.
La Fiscalía explicó hoy en un comunicado que dispuso inspecciones judiciales en la cárcel La Picota, declaraciones juramentadas a los funcionarios del INPEC, encargados del trámite y control de la orden de libertad.
Zuluaga, según la Fiscalía, sigue vinculado formalmente a una investigación por su posible responsabilidad en, por lo menos, 50 actividades relacionadas con tráfico transnacional de estupefacientes.
El ente acusador explicó que, como parte del citado proceso, un fiscal de la Dirección Especializada contra el Narcotráfico resolvió la situación jurídica y le impuso medida de aseguramiento de detención preventiva el 15 de noviembre de 2018.
Además, el 28 de octubre de 2021 fue proferida resolución de acusación en su contra por el delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes agravado, medida que fue confirmada en abril de 2022, por lo que Zuluaga debería estar preso.
Adicional a estos casos, Zuluaga está vinculado a otro proceso por desplazamiento forzado por hechos perpetrados por el denominado Bloque Héroes de Tolová de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
Esta investigación se suma a la abierta por la Procuraduría en sus pesquisas por la salida de prisión de Zuluaga.
En Colombia se le acusa por los delitos de enriquecimiento ilícito, concierto para delinquir y homicidio agravado, por lo que Migración Colombia lo dejó a disposición de las autoridades competentes para la imputación de cargos.
Zuluaga fue extraditado a Estados Unidos en mayo de 2008, en el segundo gobierno de Álvaro Uribe, junto a 14 exjefes paramilitares de las AUC, grupo que se desmovilizó en 2006.
Sin embargo, un juez desestimó que el «Gordo Lindo» fuera parte de las AUC y señaló que el capo se dedicaba únicamente al narcotráfico, por lo que se coló en el proceso de paz con los paramilitares para obtener beneficios. EFE
