Este domingo se jugará la edición 56 del evento deportivo más importantes de Estados Unidos y uno de los más grandes del mundo. Según la firma Micronomics Economic Research and Consulting, la recaudación total será de 447 millones de dólares.
Sin duda alguna el ‘supertazón’ es uno de los eventos, no solo deportivos, sino también musicales, más destacados y populares del mundo. Más de 100 millones de personas lo siguen por televisión, lo que genera que empresas y marcas se la jueguen por un espacio publicitario.
El Superbowl, en su esencia, es el partido cumbre del año en la primera división del fútbol americano en Estados Unidos, mejor conocida como la NFL. En esta oportunidad, los campeones de la conferencia oeste, Los Ángeles Rams de California, y los campeones del este, los Bengals de Cincinnati, disputarán el encuentro en el SoFi Stadium, de Los Ángeles.
El evento, que trasciende las barreras deportivas en la unión americana, tendrá en esta ocasión a artistas musicales de la talla de Snoop Dogg, Mary J, Dr. Dre, Eminem y Kendrick Lamar como protagonistas del espectáculo del medio tiempo.
Todo esto lleva a que sea una jornada de movimiento de dinero en grandes proporciones: en entradas, publicidad, productos para la ocasión, logística, comidas y bebidas, millonarios contratos de los jugadores, premios y demás.
El evento está televisado bajo el formato de Pay Per Vie (PPV) y los más de 100 millones de espectadores en todo el mundo son un gran atractivo para las empresas, que no tienen problema en invertir cifras millonarias por apenas segundos en publicidad.
Para este 2022, el 40 % de las empresas dispuestas a invertir eran nuevas, según datos de la National Broadcasting Company (NBC), canal dueño de los derechos televisivos del evento. Un comercial de 30 segundos costará entre 6,2 y 7 millones dólares (más de 2.700 millones de pesos).
Una marca o empresa puede llegar a pagar hasta 233.000 dólares (917 millones de pesos) por segundo, para aparecer televisión. La mayoría de los anuncios duran un minuto aproximadamente.
Otro de los grandes ingresos del Superbowl es el de las entradas. La más barata estaba en 4.249 dólares, según StubHub (portal de reventa de Tickets en EE.UU.), casi 17 millones de pesos colombianos. A esto se le adiciona un cargo de gastos de gestión de 1.500 dólares (5 millones 900 mil pesos) y el costo de parking, que es de 390 dólares (millón 500 mil pesos). En total, en pesos colombianos, asistir valdría más de 24 millones de pesos.
La boleta más cara, la VIP central, cuesta 74 mil dólares (290 millones de pesos).
El concierto de la mitad de tiempo es el otro gran atractivo de la jornada. Incluso hay asistentes que no les interesa el partido, pero sí el espectáculo musical. Para ellos hay una boleta de 800 dólares (poco más de 3 millones de pesos). Quien los pague puede ingresar a verlo, pero es retirado una vez terminado.
