Todo está listo para que ruede el balón en Qatar 2022, los estadios, la logística, las ciudades, los equipos, por lo visto este Mundial será un ejemplo en cuestiones de organización pero si hay un aspecto que todavía preocupa a la FIFA y al mundo en general, y es la discriminación a la comunidad LGTBIQ teniendo en cuenta que en el emirato la homosexualidad es considerada un delito.
Aunque desde un principio los organizadores dijeron que todas las personas eran bienvenidas, el exfutbolista y embajador de la Copa del Mundo, Khalid Salman, dijo este martes en una entrevista que se difundirá en la televisión alemana, que la homosexualidad es un “daño en la mente». El exinternacional de la selección catarí agregó que su país tolerará a los visitantes homosexuales pero que ellos tendrán que aceptar sus normas.
Después de abordar el tema, la entrevista fue interrumpida por un trabajador de prensa del comité organizador. Seguramente estas declaraciones generarán fuertes polémicas y protestas de diferentes sectores que desde un principio se han opuesto a la designación del país árabe como sede del Mundial.
Al igual que en muchos otros territorios musulmanes, en Catar la homosexualidad es haram, es decir, un pecado prohibido por el islam. En días anteriores varios capitanes de selecciones europeas como Inglaterra, Francia o Alemania, dijeron que lucirán brazaletes con los colores del arcoíris y el mensaje “One Love” en una campaña antidiscriminación y en apoyo a toda la comunidad LGTBIQ.