La variedad marcó este lunes el cierre de la edición 27 de Rock al Parque de Bogotá, el festival gratuito más grande de Latinoamérica, en el que las voces de Julieta Venegas, de los Aterciopelados y de Los Auténticos Decadentes se llevaron los aplausos de un público entregado.
Al festival, en el que se subieron a los escenarios 64 artistas durante tres días, asistieron miles de personas que saltaron, cantaron y gritaron al son de un variopinto grupo de ritmos que iban desde el metal más pesado -pasando por reggae, punk y música colombiana- hasta pop.
Los pogos, el baile y una tarde soleada acompañaron la última jornada en la que participaron además de estos tres artistas, la banda venezolana La Vida Bohème; el puertorriqueño Cabra, exintegrante del grupo Calle 13, y el español El Kanka.
Una conexión fuerte con Bogotá
La de este lunes fue la cuarta vez en la que Julieta Venegas se subió a la tarima de Rock al Parque, pero fue la primera vez que lo hizo como una de las "headliners" y su show ratificó la conexión que tiene con el público colombiano, que cantó a grito herido todas sus canciones.
Con un acordeón colgando del cuello, empezó a interpretar "Lento" y la gente se encendió con una seguidilla de canciones que incluyó clásicos como "Limón y sal", "Algo en ti está cambiando", "Eres para mí" y "Andar conmigo" que calentaron la fría noche bogotana.
Las linternas de los celulares iluminaron la noche cuando Venegas empezó a cantar "Porque no supiste entender a mi corazón, lo que había en él, porque no tuviste el valor de ver quién soy", la letra de su éxito "Me voy".
"Gracias hermosa Bogotá (...) Esto es una locura, no decimos adiós nunca sino hasta pronto", dijo la mexicana, tras lo cual interpretó "El presente" y cerró su show ante un público que saltó y cantó a grito herido "El presente es lo único que hay/Es contigo mi vida con quien puedo sentir que merece la pena vivir".
Fiesta en casa
Los Aterciopelados siguen reivindicando el rock colombiano y, con una puesta en escena cargada de elementos curiosos y coloridos se llevaron los aplausos y llenaron de energía el Parque Simón Bolívar.
"Gracias Bogotá, es un honor, un placer estar acá", cantó Andrea Echeverri en medio de los aplausos y el fervor del público que mejor conoce a esta banda que lleva vigente 31 años en la escena musical latinoamericana.
Uno de los puntos más emocionantes de su espectáculo llegó cuando invitaron a la tarima a la colombiana Briela Ojeda, con la que cantaron "Siervo sin tierra", un clásico de 1995 que dedicaron a los campesinos del país.
Luego se subió a otra de las representantes de la escena alternativa colombiana, a La Muchacha, que desde que apareció en la tarima se conectó con el público y cantó con Echeverri y su banda "La cosas de la vida" .
Para el cierre los Aterciopelados interpretaron tres de sus canciones más reconocidas: "La estaca", "Bolero falaz" y "Florecita rockera", esta última en la cual volvieron a subir a la tarima a Ojeda y a La Muchacha.
Esto llevó a los asistentes a levantar sus teléfonos para grabar canciones que, a pesar de haber sido lanzadas hace décadas, siguen vigentes en los oídos de los fanáticos.
Durante el fin de semana también se presentaron otros artistas como la banda colombiana Los PetitFellas, la española Carolina Durante y la argentina Los Pericos.
EFE/ Jorge Gil Ángel.