El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, denunció lo que denominó otra “intromisión del Gobierno Nacional en asuntos que deben ser definidos por Bogotá y que, por cierto, la ciudad ya definió”. El mandatario distrital se refiere una demanda del Ministerio del Ambiente ante el Consejo de Estado contra la licencia ambiental para ampliar la Avenida Boyacá.
El proyecto vial queda paralizado porque el alto tribunal decidió admitir la demanda y así la Corporación Regional Autónoma (CAR) pierde la competencia para decidir al respecto. Aunque se falle a favor, mientras se hace el estudio la obra no avanzará.
“Con esta demanda, el Gobierno Nacional está haciendo todo para bloquear la posibilidad de que se avance en una obra estratégica para la movilidad de Bogotá. Lo he dicho en varios escenarios: el Gobierno Nacional quiere impedir por cualquier medio la ampliación de la Avenida Boyacá. Este proyecto hace parte del desarrollo organizado con las compensaciones ambientales necesarias que requiere la ciudad”, dijo Galán.
Pese a la suspensión de los trabajos, el alcalde enfatizó que harán todo lo posible “para hacer respetar la autonomía de Bogotá”.
Frente a la declaración del alcalde, la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, dice que su labor es permitir que se cumpla la normativa ambiental y, según ella, en este caso se incumplió sobre una reserva ambiental fundamental para la estabilidad climática de la sábana de Bogotá. A su juicio, la obra generará "graves perjuicios" y la demanda "no se debe interpretar como una intromisión".
Las obras, que se realizan entre las calles 170 y 183, ya en febrero de 2024, habían avanzado en 54 %. Son 1,3 kilómetros de longitud, se convertiría en 10,3 kilómetros de carriles y vías que mejoraría el flujo vehicular.