El fútbol europeo está crispado. Especialmente la glamurosa y millonaria Premier League de Inglaterra. En España, dirigentes y técnicos se llevan las manos a la cabeza al ver la partida de una parte de sus mejores futbolistas. En Italia, se habla en voz baja del tema, no quieren que sus pocas estrellas migren atraídos por el maná de los petrodólares.
Pero la Liga de Arabia Saudita tiene como objetivo convertirse en la más millonaria del mundo. Contratar las mejores estrellas de los equipos europeos y darle fuerza a un campeonato que hasta hace unos pocos meses, no existía en el plano mundial.
Para ello, han creado el Fondo de Inversión Pública con el fin de ofrecer millonarios contratos, no sólo a jugadores que están llegando al tope de su nivel en Europa, si no también a jóvenes talentos que comienzan el ciclo de la nueva generación de futbolistas, cada vez más atletas, más físicos y preparados para correr la barbaridad de 12 kilómetros por partido.
La primera fase, diseñada por el príncipe heredero Mohammed Bin Salman, es lograr la contratación de 20 mega estrellas del fútbol europeo. Para lograrlo se utilizarán recursos del Fondo de Inversión Pública que cuenta en sus arcas con un presupuesto 620.000 millones de euros.
La punta de lanza de este proyecto ha sido la contratación de Cristiano Ronaldo, considerado con Lionel Messi, las dos grandes estrellas del fútbol en la última década. Los dirigentes del fútbol saudita firmaron un contrato por dos años con el jugador luso que alcanza la cifra de los 300 millones de euros.
Pero el Fondo de Inversión Pública, no tendrá una vida efímera. Por el contrario, será una chequera abierta por 20 años. No sólo servirá para contratar a los mejores futbolistas, sino también técnicos, preparadores físicos, inversiones en instalaciones deportivas de última tecnología, que les permita armar una sólida base y darle fuerza a su torneo doméstico que en la actualidad cuenta con 16 equipos.
“La Liga de Arabia Saudita tiene como objetivo convertirse en la más millonaria del mundo. Contratar las mejores estrellas de los equipos europeos y darle fuerza a un campeonato que hasta hace unos pocos meses, no existía en el plano mundial”
Otros deportes
Así lo han hecho con el golf donde la inversión de 2.000 millones de euros ha permitido la creación del LIV con el fin de poder tener los mejores jugadores tanto de Estados Unidos como Europa, y convertirse en una opción paralela del PGA Tour, que es el torneo élite del golf masculino durante generaciones. Algunas de las estrellas de este deporte han calificado la aparición de Arabia Saudita como una “intromisión indecorosa de dinero”.
Sin embargo, la LIV debutó a mediados del 2022. Cada parada del torneo ofreció cuatro millones de dólares de premio. Para ponerlo en contexto, el Torneo Masters 2022, el premio mayor fue de 2,7 millones. A Phil Mickelson, una de las grandes estrellas, le pagaron 200 millones de dólares por sólo participar en el torneo. La migración de otros golfistas no se hizo esperar y la chequera sin fondo pagó participaciones entre 150 y 180 millones de dólares.
Otro de los deportes élite en los cuales ha incursionado Arabia Saudita es en la Fórmula 1. El Fondo de Inversión Pública, le hizo una oferta a Liberty Media, que maneja los derechos de la Fórmula 1 por 20.000 millones de euros, tentadora oferta que sigue develando los intereses de los hoy dueños de uno de los deportes que más dinero mueve a nivel mundial.
El fútbol
Este espejo, tiene a los dirigentes del fútbol europeo más que preocupados. El último capricho del fútbol de Arabia Saudita se llama Mohamed Salah, el delantero estrella del Liverpool. Uno de los mejores jugadores de la Premier League. El Fondo de Inversión Pública tiene una oferta de 200 millones de libras esterlinas (233 millones de euros) por la compra de su pase.
El Liverpool ha dicho no, por ahora. Los especialistas han señalado que, si Salah se marcha, ninguna liga, ni club de Europa estaría a salvo de la danza de los millones del fútbol de Arabia Saudita.
Mohamed Salah (Liverpool) → 250 millones de euros
La Saudí Pro League ha venido escalando a un ritmo frenético. Es una liga joven en el mundo del fútbol. Tiene tan solo 16 años. Algunos futbolistas que estuvieron en los clubes europeos terminaron su carrera atraídos por excelentes sueldos. Pero no pasaron de simples noticias de transferencia que con el tiempo se fueron olvidando.
Pero todo comenzó a cambiar en diciembre del año pasado cuando se anunció la contratación de Cristiano Ronaldo. Pero una cosa es tener jugadores mayores de 30 años como Roberto Firmino, Jordan Henderson y otra muy diferente, con la llegada de Karim Benzema, actual balón de oro, Neymar, que ha sido protagonista de los miles de millones que han invertido los jeques árabes en los clubes europeos.
No sólo se trata de jugadores consagrados. También han contratado jugadores muy jóvenes como Gabri Veiga del Celta de Vigo y que se comenzaba a perfilar en un referente de la nueva generación de Liga Española. Había recibido ofertas de los mejores clubes como el Real Madrid, el Manchester City, entre otros, y prefirió los millones de euros de Arabia Saudita.
La invasión de los jeques árabes no es nueva. Los millonarios contratos que hoy perciben los futbolistas, es en buena parte a la inversión que han hecho en la compra de equipos de media tabla en los torneos europeos y que hoy están ubicados entre los más competitivos a nivel mundial. Caso Manchester City, Paris Saint-Germain, que pagó 200 millones de euros por Neymar y 259 millones de euros por Kylian Mbappé. Recientemente los petrodólares permitieron la compra del equipo de la Premier League, Newcastle. “Las Urracas”, cómo se les conoce en el mundo del fútbol, era un equipo de media tabla hacia abajo e incluso estuvo a punto de pasar a la segunda división del fútbol inglés. En sólo un año, la inversión en grandes jugadores, lo tiene actualmente clasificado en la Champions League.
Hasta ahora, la Premier League es considerada la liga más grande y más vista en el mundo. Inglaterra perdía jugadores ocasionalmente, que iban a parar a los equipos italianos y algunos a los españoles. Pero con la Saudí Pro League lo que se está viendo es un ataque masivo en busca de las mejores estrellas. Y si el dinero es mejor en Arabia Saudita, nadie los detendrá.
Karim Benzema (Al-Ittihad) → 200 millones de euros
Cristiano Ronaldo (Al-Nassr) → 300 millones de euros
Neymar Jr (Al-Hilal FC) → 100 millones de euros
Sadio Mané (Al-Nassr) → 80 millones de euros