Los Boston Celtics se impusieron este jueves con contundencia en el primer partido de las Finales de la NBA (107-89) en un partido que dominaron de principio a fin con una gran actuación colectiva ante unos Mavericks donde sólo sobresalió Luka Doncic, que firmó 30 puntos y 10 asistencias en su debut en la pelea por el anillo de campeón.
Los de Joe Mazzulla llevaron el control del encuentro desde el comienzo, cerrando el primer cuarto con un 37-20, después de tres triples consecutivos en el último minuto. Destacó la actuación de un Kristaps Porzingis, autor de uno de esos triples, que no disputaba un partido de 'playoffs' desde la primera ronda. El letón se 'vengó' de su exequipo, al que hizo mucho daño con 20 puntos, 6 rebotes y 3 tapones, y en anotación sólo fue superado en su equipo por Jaylen Brown (22).
La ventaja en el segundo cuarto llegó a rondar los 30 puntos, pero un parcial final de los de Jason Kidd logró dejarla en 21 antes de terminar el segundo cuarto, pero con los de Massachusetts muy dominadores, con hasta seis jugadores con más de diez puntos, ante unos Mavericks en los que solo Doncic superó los 15 puntos y donde Kyrie Irving se quedó en 12, con un discreto 6/19 en tiro, 0/5 en triple.
Una gran salida de vestuarios de la franquicia texana llegó a acercarle a ocho puntos mediado el tercer cuarto, pero de nuevo los locales supieron aguantar el arreón de sus rivales y volvieron a estirar la ventaja en el electrónico, llegando al último periodo con 20 puntos de renta (86-66).
En el último cuarto ya no hubo más opciones de remontada, y pese a los intentos de Doncic de liderar a los suyos, los Celtics no levantaron el pie del acelerador y cerraron con contundencia la primera victoria en estas Finales. Los 'Mavs', que durante toda la temporada regular y estos Playoffs han destacado por su gran labor defensiva, no pudieron sostener el gran potencial ofensivo de los Celtics.
El segundo partido de las Finales se disputará la madrugada del domingo al lunes a las 2.00 hora española, también en el TD Garden, con Boston buscando conseguir su segunda victoria consecutiva en unas Finales, algo que no hacen desde las de 2010 ante los Lakers de Pau Gasol y Kobe Bryant.