El avión que transporta a la selección venezolana de fútbol experimentó un problema de abastecimiento de combustible que retrasó su salida de Perú, según informó una fuente del operador aéreo en Lima a la AFP. La fuente desestimó la versión de Caracas sobre un presunto "secuestro" de la aeronave y aclaró que se trata de problemas técnicos comunes en los aeropuertos.
"No es un problema de migraciones o del Estado (peruano). Son temas técnicos que ocurren en los aeropuertos", indicó la fuente, solicitando la reserva de su identidad.
El canciller venezolano, Yván Gil, expresó en redes sociales que el Gobierno de Perú estaba impidiendo que el avión de la selección venezolana recargara combustible para emprender el vuelo, calificando la situación como un "secuestro" y atribuyéndolo a represalias por el buen desempeño del equipo en el empate 1-1 frente a Perú.
Estas afirmaciones se suman a la denuncia previa del futbolista venezolano Nahuel Ferraresi, quien señaló haber sido víctima de agresiones por parte de policías encargados de la seguridad en la cancha durante el partido.
Al momento, las autoridades peruanas, no se han dirigido al público con información precisa en la cual justifiquen o se defiendan de las acusaciones.