Participante ‘Mujeres sin límites’, Fundación Belcorp
Son muchas las que desean emprender o que tienen en mente una novedosa idea de negocio pero que no saben cómo ejecutarla o llevarla a cabo. Aunque hoy en día existen varias iniciativas enfocadas en apoyar a los nuevos empresarios, son pocas las que están dirigidas exclusivamente a las mujeres, quienes, a la hora de iniciar un negocio, pueden encontrar necesidades específicas que requieren de una asesoría y capacitación especializadas.
Cifras del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), indican que el número de mujeres propietarias de microempresas es cada vez menor. En 2019, 38 de cada 100 negocios eran de mujeres, mientras que en 2022 tan sólo fueron 36. Según Verónica Melzi, gerente de la Fundación Belcorp, institución que tiene por objetivo impulsar el potencial de las mujeres a través del emprendimiento, se ha identificado que los micronegocios manejados por mujeres resultan más vulnerables, al verse afectados en sus etapas tempranas.
Para la ejecutiva existen muchas razones que explican esta vulnerabilidad, que también se puede presentar en emprendimientos dirigidos por hombres pero que suele ser más frecuente en las mujeres.
La falta de confianza en las propias capacidades es una de estas causas, principalmente en los países latinoamericanos donde a las niñas se les dice que tienen que ser cuidadosas y no se les incita a que sean más arriesgadas, esto promueve que, una vez son adultas y deciden iniciar un negocio, la mayoría se incline por sectores más tradicionales en lugar de otros que pueden ser más rentables o productivos. Hay quienes se quedan en sectores de comercio o servicios donde la competencia es mucho mayor y donde tal vez se requiere, de entrada, un capital de inversión menor y por lo tanto es más difícil que crezcan.
Otra barrera —y quizás la más difícil de superar— es el manejo del tiempo, ya que muchas empresarias son además amas de casa y sobre ellas recaen las tareas del cuidado del hogar, de manera tal que sus negocios quedan relegados a un segundo plano y muchas de ellas después de sus actividades no encuentran tiempo ni energía suficiente para dedicarle a sus emprendimientos, reduciendo las posibilidades de que un proyecto crezca.
Además, por lo general las redes de contactos de las mujeres tienden a ser más reducidas que las de los hombres: “ellas suelen moverse en círculos más familiares o de amigos, o existen restricciones de parte de sus parejas para que salgan y se muevan en ambientes más grandes, todavía existe la tendencia a cuidarlas y todo eso hace que sus redes comerciales resulten más limitadas” afirma Melzi.
Verónica Melzi, gerente de la Fundación Belcorp
“Mujeres sin límites”
Hay diversos motivos por los cuales una mujer puede en cualquier momento abandonar su propio negocio o desistir de su idea de emprendimiento, es por esto que surgen iniciativas que trabajan para evitarlo. Una de ellas es “Mujeres sin límites”, la cual busca potenciar el liderazgo creativo y capacidades que les permitan dirigir negocios sólidos y que impulsen su crecimiento a partir de su propósito de vida.
Este programa, que es totalmente gratuito y hace parte de la Fundación Belcorp, inició como un piloto en el año 2019 de manera presencial en Perú y luego se quiso replicar tal cual en Colombia en 2020 pero debido a la pandemia del covid-19 se optó por implementarlo de forma virtual con el apoyo de la Universidad del Rosario. A pesar de las circunstancias, se consiguieron buenos resultados. En ese momento el programa ayudó especialmente a las emprendedoras que estaban siendo afectadas por la emergencia sanitaria a encontrar nuevas formas de pensar sus negocios, a innovar y utilizar mejor los canales digitales.
Toda esa experiencia adquirida permitió diseñar una versión mejorada de “Mujeres sin límites”, mucho más parecida a lo que es hoy día. Fue un proceso de cocreación entre el equipo de la fundación y las participantes, en el que se tuvieron en cuenta todas sus necesidades y dificultades para el diseño de las ediciones de 2021 y 2022.
A la fecha han logrado beneficiar a más de 37.000 mujeres en cinco países (Colombia, Ecuador, Chile, Bolivia y Perú) y para finalizar el 2023 esperan poder replicarlo también en México y República Dominicana. Básicamente la esencia del programa es la misma en todos los países pero se trabaja con distintos aliados de manera que se pueda contextualizar y localizar mejor en cada territorio.
“El programa ayudó especialmente a las emprendedoras que estaban siendo afectadas por la emergencia sanitaria a encontrar nuevas formas de pensar sus negocios, a innovar y utilizar mejor los canales digitales”
Participante ‘Mujeres sin límites’, Fundación Belcorp
Fases del programa
La iniciativa cuenta con dos fases, la primera es la fase fundamental que tiene como objetivo transmitir a las participantes todos los conocimientos necesarios para fortalecer su autoconfianza y desarrollar una idea de negocio más sólida, con una propuesta comercial robustecida y un proyecto más ordenado.
En esta etapa, que tiene una duración de 13 semanas, un 30 % de los contenidos están vinculados al fortalecimiento de habilidades blandas, mientras que el 70 % restante incluye temas de gestión de negocios para que las participantes aprendan a llevar, por ejemplo, registros de ventas o registros de gastos. Esto que para algunos parece algo muy básico es realmente algo que requiere conocimientos específicos y que permite identificar si un negocio es rentable o qué posibilidades de crecimiento tiene.
En el caso de Colombia, el gran aliado para poder desarrollar el programa ha sido la Universidad del Rosario, que además de brindar una formación profesional de alto nivel, les concede a aquellas que culminan el proceso, un certificado de estudios, lo cual resulta un incentivo muy valioso, teniendo en cuenta que más del 50 % de las participantes nunca han tenido la oportunidad de acceder a educación superior.
Una vez culminada la fase fundamental, las interesadas pueden postularse a una segunda fase que denominan de consolidación. Es ahí cuando los encargados del programa se ocupan de elegir aquellas propuestas mejor estructuradas y con mayor potencial para que hagan parte de esta segunda etapa que dura nueve semanas adicionales. En estas nueve semanas, se profundizan conocimientos de gestión de negocios con enfoque más gerencial y tienen la posibilidad de recibir asesorías personalizadas, con las que los mentores pueden conocer mucho mejor cada negocio y orientar a las autoras sobre aquello que más deben fortalecer.
Edición 2023
La inscripción estará abierta en la página www.mujeressinlimites.biz, hasta el próximo 19 de mayo. El requisito principal para acceder al programa es que el emprendimiento sea liderado por una mujer entre los 20 y 60 años. La meta es poder certificar más de 1.300 mujeres en Colombia.
Todas las participantes pueden ser parte de la comunidad de “Mujeres sin límites”, una comunidad de exalumnas que sigue recibiendo asesorías incluso después de terminado el curso. Los principales objetivos son seguir brindando herramientas y conocimientos, mantener su motivación y conectarlas con el ecosistema empresarial. “Estamos adelantando conexiones y convenios con algunas organizaciones vinculadas al ecosistema del emprendimiento femenino en Colombia para ver de qué manera ellas pueden acceder y aprovechar al máximo los beneficios y recursos que ofrecen”, asegura la gerente de la fundación.