David Ortiz, CEO de Siigo
Muchos contadores y dueños de negocios fueron testigos de la digitalización de la contabilidad de sus empresas en Colombia, atrás quedaron los cuadernos en los que apuntaban a diario sus ventas y gastos, hoy en día tanto micro, pymes, medianas o grandes empresas lo hacen a través de programas diseñados especialmente para este fin, y una de las compañías que hizo posible dicha transición fue Siigo, casi que cualquier contador, administrador o gerente la conoce o por lo menos ha oído hablar de sus productos que han ido evolucionado de acuerdo a las necesidades de sus clientes.
Siigo es una empresa colombiana que desarrolla tecnologías amigables y simples que pretenden llevar a las pequeñas y medianas empresas al siguiente nivel de la digitalización de procesos administrativos como la contabilidad, la facturación, la administración y las finanzas de los negocios. Inició operaciones en 1988, desde entonces ha contribuido al crecimiento de muchas compañías no sólo en Colombia sino también en otros países de Latinoamérica donde sus clientes han podido acceder y beneficiarse de las soluciones tecnológicas que ofrecen, en especial contadores y empresarios.
Ricardo Ortiz fue su creador, el encargado de su consolidación en Colombia y estuvo a su mando casi 30 años, pero en 2018 decide cederle las riendas a su hijo David Ortiz, quien se puso a la tarea de desarrollar e implementar nuevos productos y de la internacionalización de la marca.
David es ingeniero industrial y administrador de empresas con magister en Administración de Empresas de Inalde Business School, según cuenta dentro de sus planes no estaba contemplada la idea de trabajar en Siigo, de hecho cuando recibió la invitación de su padre para que trabajara en la empresa, esta ya no era de propiedad de Ricardo, para ese entonces habían vendido casi el 80 % de las acciones a otros empresarios.
“Uno de los pilares en la estrategia de Siigo consiste en contar con una cultura corporativa sólida enfocada en atraer el mejor talento y encaminarlo en un mismo propósito”
Inicialmente Ortiz hijo, decidió optar por el camino del emprendimiento con Solsoft, una empresa de tecnología e indicadores de gestión que empezó como un proyecto universitario y que con el tiempo terminó fusionándose con Siigo. El puesto de CEO en la empresa de su padre se lo ganó a pulso, allí empezó a desempeñarse como gerente de Innovación, desde donde volcó la estrategia de la compañía a la nube, luego fue encargándose de más áreas como soporte, mercadeo y así sucesivamente hasta que en 2018 asume el puesto de su progenitor, quien al ver que la organización va por buen camino decide dejarla completamente en sus manos.
Antes de asumir la Presidencia, este ingeniero lideró el proceso de internacionalización, por el hecho de ser una empresa de tecnología y estar en medio de un cambio de modelo de negocio de software local a software en la nube, requerían recursos para poder seguir creciendo y expandirse a otros mercados de la región. En 2017 reciben capital de Accel-KKR, uno de los fondos de inversión en tecnología más importantes de Silicon Valley, además hicieron alianzas con empresas líderes en otros países que también se dedicaban a los mismo como Contífico en Ecuador y Memory en Uruguay, para así emprender el sueño de expandir su tecnología en software contable, administrativo, facturación y nómina electrónica a más de dos millones de empresas en Latinoamérica.
Se calcula que más de un millón de empresarios usan alguna tecnología de Siigo, además de Colombia también están presentes en México, Uruguay, Ecuador, Perú y Chile. Para David esto es posible porque “uno de los pilares en la estrategia de Siigo consiste en contar con una cultura corporativa sólida enfocada en atraer el mejor talento y encaminarlo en un mismo propósito: ofrecer el mejor servicio a partir de innovación en producto que aporte a la transformación digital y competitividad de las empresas”. Y aunque reconoce que han tenido altibajos, teniendo en cuenta la complejidad del reto, han logrado buenos resultados gracias a sus productos, tecnología, soporte y un modelo de negocio que ha trascendido internacionalmente.
“A la fecha, la Fundación Siigo ha logrado que más de 11.000 jóvenes entre los 16 y 29 años, accedan a una educación integral e ingresen al mercado laboral por medio de más 7000 contratos de aprendizaje”
Proyecto de vida
Más que los buenos rendimientos, la mayor satisfacción de David y que ha asumido como una misión de responsabilidad social, es poder contribuir al progreso de millones de empresarios que al principio no sabían llevar el control financiero de sus empresas pero que a través de sus productos aprendieron a manejar la contabilidad y de paso evitar la extinción de muchos emprendimientos que en ocasiones fracasan por la inexperiencia de sus dueños en la parte financiera.
“Hace cinco años pusimos en una pared gigantesca que nuestra meta era transformar la vida de mil empresarios al mes, el día que lo logramos, celebramos pero no mucho porque de inmediato pensamos en que era posible ayudar a muchos más y que íbamos a celebrar cuando toda empresa por más pequeña que sea, utilice un software contable, ya sea el nuestro o el de cualquier otra compañía” dice el CEO.
El crecimiento registrado en los últimos años, la capacidad de generar empleo, constituirse en una de las mejores empresas para trabajar en América Latina según Great Place to Work, sumado a su rol de transformador digital, fueron razones suficientes para David obtuviera en 2021 el reconocimiento de emprendedor del año de parte de Endeavor Colombia.
Efecto multiplicador
El concepto de un emprendedor exitoso ya no se limita a los indicadores de crecimiento y valoración de sus organizaciones, sino también al impacto que producen en la sociedad, transformando economías o estilos de vida en sus comunidades de influencia. Y si alguien sabe de esto es precisamente Ricardo que hace 20 años puso en marcha la Fundación Siigo, cuya misión es mejorar desde la formación académica gratuita, la calidad de vida de los jóvenes potencializando su perfil de empleabilidad. De igual manera trabajan con organizaciones como el Sena lo cual permite ampliar la cobertura de enseñanza y el número de jóvenes que se pueden beneficiar, apoyando la inserción laboral.
A la fecha esta entidad sin ánimo de lucro ha logrado que más de 11.000 jóvenes entre los 16 y 29 años, accedan a una educación integral e ingresen al mercado laboral por medio de más 7.000 contratos de aprendizaje. Su meta ahora es poder seguir beneficiando a más jóvenes y para ello han establecido un modelo con el que todos ganan, instituciones educativas recibiendo nuevos estudiantes, empresas con nuevos empleados, la Fundación ayudando a más jóvenes y Siigo con más enamorados de la marca que al utilizar sus productos contribuyen al progreso de los empresarios, es así como se evidencia lo que denominan el Efecto Multiplicador.
Fundación Siigo