El presidente Gustavo Petro anunció el acuerdo tras una reunión con cerca de 20 ejecutivos del sector bancario colombiano. La iniciativa busca reactivar la economía mediante la asignación de mayores recursos crediticios a actividades productivas. Los fondos se distribuirán en los sectores de construcción y mejoramiento de vivienda, industria, manufactura, agricultura y turismo.
Los 55 billones de pesos serán administrados por bancos privados y públicos, no por el gobierno. Las entidades financieras otorgarán los créditos con tasas de interés que variarán según cada institución. El presidente Petro enfatizó que no habrá inversión forzosa y que este acuerdo reemplaza la necesidad de presentar una ley ante el Congreso de la República.
El dinero será entregado directamente a empresarios y personas naturales en forma de créditos. Aunque las tasas de interés serán más bajas que las del mercado actual, los detalles específicos aún están por definirse entre la banca privada y pública. En algunos casos, el gobierno respaldará los créditos para garantizarlos ante los bancos.
Jonathan Malagón, presidente de Asobancaria, transmitió un mensaje de tranquilidad a los ahorradores. Afirmó que el sistema financiero custodiará el dinero de las personas y que los ahorros de los colombianos no están en riesgo. Malagón indicó que los recursos se entregarán bajo lógicas de mercado, enviando una señal positiva a inversionistas y ahorradores.