El Congreso de la República de Colombia ha aprobado este miércoles el proyecto de ley 325, liderado por la senadora Norma Hurtado y el senador José David Name, con el fin de establecer una regulación para los cigarrillos electrónicos, vapeadores y otros productos derivados del tabaco en el país.
La plenaria de la Cámara de Representantes dio luz verde al proyecto después de haber sido aprobado en el Senado en sus dos primeros debates. Ahora, se procederá a la conciliación de los textos resultantes del segundo y el cuarto debate, con el objetivo de obtener una ley unificada que finalmente pasará a sanción presidencial. El proyecto ha recibido el respaldo de organizaciones de la sociedad civil como Red Papaz y Fundación Anáas.
La finalidad de esta nueva ley es incluir a los cigarrillos electrónicos y vapeadores dentro de las limitaciones establecidas en la ley 1335 de 2009, conocida como la “Ley Antitabaco”. Esta normativa, que busca prevenir el consumo de tabaco y la exposición al humo en el país, prohíbe fumar en lugares públicos cerrados y limita la publicidad y promoción de estos productos. La modificación propuesta tiene como objetivo minimizar los riesgos para la salud de los usuarios.
El proyecto también pretende regular la venta y publicidad de estos dispositivos para evitar su promoción entre jóvenes y no fumadores. Se contempla la implementación de campañas de salud y educación dirigidas a reducir su consumo, similar a lo establecido para los cigarrillos tradicionales.
Aunque la industria tabacalera estaba a favor de una regulación, solicitaba que estos productos fueran objeto de una regulación diferenciada. Marla Gutiérrez, directora ejecutiva de ALTERPRO, el gremio que agrupa a varias empresas tabacaleras, señaló que la nueva ley plantea algunos desafíos, como la necesidad de adaptar la regulación a productos innovadores como las bolsas de nicotina.