El encargado del Departamento de Estado para América Latina, Brian Nichols, hizo un llamado a garantizar la seguridad de los opositores refugiados en la embajada argentina en Caracas. La declaración surge luego de que la líder opositora María Corina Machado denunciara presuntos intentos de ingreso de organismos de seguridad a la sede diplomática.
Nichols señaló que las tácticas contra ciudadanos, activistas y defensores de la libertad en Venezuela reflejan un esfuerzo por mantener el poder. Además, calificó estas acciones como hostiles y pidió atención inmediata a la situación para evitar mayores tensiones.
Según las denuncias, la embajada permanece sin electricidad y enfrenta restricciones en el acceso al agua desde hace 12 días. María Corina Machado alertó que estas condiciones afectan directamente a los seis opositores refugiados, en su mayoría miembros del partido Plataforma Unitaria Democrática (PUD).
El ministro de Interior de Venezuela, Diosdado Cabello, rechazó las acusaciones, asegurando que se trata de una estrategia de la oposición para llamar la atención de la comunidad internacional. Según Cabello, las denuncias son infundadas y buscan desacreditar al gobierno.
Los opositores refugiados, identificados como Pedro Urruchurtu, Omar González, Claudia Macero, Humberto Villalobos y el exministro Fernando Martínez Mottola, han permanecido en la embajada en medio de denuncias de asedio y restricciones.
Estados Unidos reiteró su compromiso con la seguridad de los refugiados y solicitó la colaboración de la comunidad internacional para garantizar la protección de sus derechos fundamentales.