El Papa ha instado a los padres a que saquen tiempo para jugar y reír con sus hijos "con paciencia" y ha reclamado a las sociedades que miren a los niños y se contagien de su "sana curiosidad" y "su capacidad de llorar y reír espontáneamente".
"Detengámonos, pues, a hablar, jugar y reír con nuestros hijos; ¡con paciencia, como saben hacerlo los abuelos! Escuchemos lo que nos dicen y lo que Dios nos dice a través de ellos. Si nos ponemos delante del niño Jesús y en compañía de los niños, aprenderemos a asombrarnos y empezaremos más sencillos y mejores, como los Magos", ha propuesto Francisco.
Durante el ángelus de este sábado en el que la Iglesia católica celebra la Epifanía, el Papa ha instado a "mirar a los pequeños" que también "hablan de Jesús" e imitar "su asombro, su sana curiosidad, su capacidad de llorar y reír espontáneamente, de soñar".
Por ello, ha instado a los creyentes a preguntarse si son "capaces de ver los problemas del mundo a través de los ojos de los niños" y ha invitado a rezar "por todos los niños, especialmente los probados por las guerras y la injusticia".