La administración Biden avanza en la concreción de un paquete de venta de armas y municiones a Israel valorado en 680 millones de dólares. La operación incluirá miles de kits de municiones de ataque directo conjunto y cientos de bombas de pequeño diámetro, según un funcionario estadounidense relacionado con la operación.
El funcionario aseguró que la venta continuará a pesar del actual cese al fuego entre Israel y Hezbolá. Según la fuente, esta decisión no está condicionada por la tregua, ya que el paquete venía siendo trabajado desde hace varios meses.
El plan fue presentado inicialmente a los comités del Congreso en septiembre, recibiendo ajustes posteriores en octubre. Este proceso se enmarca en los procedimientos regulares de supervisión legislativa para operaciones de este tipo.
Ayer, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, mencionó el retraso en la entrega de armas como uno de los factores que influyeron en el acuerdo de cese al fuego con Hezbolá. Netanyahu destacó la importancia de estas municiones para la seguridad de Israel.
La revelación del paquete de armas ocurre en un contexto de atención internacional por la tregua en la región, marcando la continuidad del apoyo militar de Estados Unidos hacia Israel en medio de las tensiones en Oriente Medio.
