Miles de manifestantes se congregaron en Jerusalén para exigir al primer ministro Benjamín Netanyahu un acuerdo de intercambio de rehenes con Hamás. Las manifestaciones comenzaron frente al Tribunal Supremo de Israel, desde donde los asistentes marcharon hasta la residencia del primer ministro, manifestando su descontento por la situación de los rehenes.
El contexto de las protestas se enmarca en la decisión de Netanyahu de destituir a su ministro de defensa, Yoav Gallant, citando una “crisis de confianza” entre ambos. La destitución ocurrió luego de que Gallant expresara su respaldo a un acuerdo de liberación de prisioneros, mostrando así un desacuerdo con las posiciones del primer ministro.
La destitución de Gallant no es un hecho nuevo en el gobierno de Netanyahu. En marzo del año pasado, el primer ministro ya había despedido al entonces ministro de defensa debido a su oposición a la reforma judicial propuesta por el gobierno. Esta situación subraya las diferencias que han marcado la relación entre ambos funcionarios.
Netanyahu, por su parte, argumentó que las diferencias se profundizaron debido a “declaraciones y acciones” de Gallant que, según el primer ministro, contradecían las decisiones gubernamentales y del Gabinete. En su lugar, el ministro de Asuntos Exteriores, Israel Kantz, asumirá temporalmente el cargo de ministro de defensa.
Las protestas también se replicaron en Tel Aviv, donde manifestantes expresaron su inconformidad con Netanyahu y exigieron acciones para la liberación de los rehenes que permanecen en Gaza. La presión sobre el gobierno aumenta a medida que la situación se prolonga.