En un operativo llevado a cabo en la localidad de Usme, al sur de Bogotá, las autoridades detuvieron a una mujer acusada de torturar y explotar laboralmente a sus dos hijos menores de edad. La captura se efectuó por orden judicial, bajo el cargo de tortura agravada.
Según la investigación, la mujer obligaba a sus hijos, actualmente de 13 y 14 años, a vender bolsas de basura en la calle, exigiéndoles una cuota diaria de 50,000 pesos colombianos. Este sistema de explotación habría estado en funcionamiento durante aproximadamente cinco años, iniciando cuando los menores tenían apenas 8 y 9 años de edad.
La investigación reveló un patrón de abuso sistemático contra los menores. De acuerdo con los informes, si los niños no lograban cumplir con la cuota diaria impuesta, eran sometidos a castigos físicos y psicológicos. Entre las formas de castigo se incluían golpizas y el encierro en un cuarto oscuro.
El caso salió a la luz cuando los menores finalmente decidieron informar a su padre biológico sobre la situación que estaban viviendo. Fue este quien interpuso la denuncia formal ante las autoridades, lo que eventualmente llevó a la captura de la mujer.
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La gravedad de la situación fue crítica por la presunta participación del padrastro de los menores, pareja actual de la mujer detenida. Según la investigación, este individuo habría utilizado un arma de fuego para intimidar a los niños, con el objetivo de evitar que revelaran su situación a su padre biológico. Tras su captura, la mujer fue puesta a disposición de la Fiscalía para continuar con el proceso legal correspondiente.
