Los cancilleres de Colombia, Luis Gilberto Murillo, y Brasil, Mauro Vieira, evitaron este jueves referirse a Venezuela durante una declaración sin convocatoria a medios realizada después de su reunión en Bogotá, que se produce un día después de que los presidentes de ambas naciones conversaron por teléfono sobre la crisis que vive el país caribeño.
Vieira estuvo varias horas en el Palacio San Carlos, sede de la Cancillería colombiana, a puertas cerradas con Murillo en una reunión donde se esperaba que ambos trataran la crisis abierta en Venezuela tras las elecciones del pasado 28 de julio.
Pero tras el encuentro, en una declaración grabada y divulgada por la Cancillería colombiana, la única referencia al asunto ha sido muy vaga y ha venido de Murillo: "Destacamos el avance en lo que tiene que ver con la relación de las consultas políticas para asuntos globales, asuntos regionales y las tareas que tienen nuestras misiones diplomáticas".
Preguntado por los medios a la salida de Cancillería, el embajador colombiano en Brasil, Guillermo Rivera, aseguró hoy que no tiene "autorización para hablar sobre los temas de Venezuela, solamente sobre los temas de la relación bilateral entre Colombia y Brasil, que es una relación muy sólida, muy afectuosa".
Lo tratado en la llamada del miércoles entre el mandatario colombiano, Gustavo Petro, y el brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, se mantuvo en términos confidenciales, según informó una fuente cercana al Gobierno de Colombia, pero enmarcado en los esfuerzos de estos países para ayudar a encontrar una solución a la actual situación de Venezuela.
Hoy tanto Petro como Lula han esbozado propuestas para la crisis que han ido en direcciones similares pero con algunas diferencias: mientras el brasileño propuso dos soluciones -la formación de un gobierno de coalición que integre miembros del chavismo y de la oposición o la celebración de nuevas elecciones-, Petro sugirió un "frente nacional" como paso "transitorio" hacia una "solución definitiva" a la crisis.
Así el colombiano evocaba la solución que el Partido Liberal y el Conservador colombianos encontraron en el siglo XX para expulsar del poder al general Gustavo Rojas y con la que se turnaron, después de un pacto político, durante casi 20 años el poder.
Agenda conjunta
Se trata de la segunda reunión bilateral de los cancilleres en menos de un mes, después de que en julio Murillo fue a Brasil a reunirse con Vieira en Brasilia el 25 de julio, apenas tres días antes de que tuvieran lugar las elecciones en Venezuela.
Ambos aprovecharon para revisar temas de comercio, tecnologías de la información y asuntos medioambientales y agricultura y también tratar la próxima cumbre de biodiversidad (COP16) que se celebrará en Cali, capital del departamento colombiano del Valle del Cauca.
"Colombia resalta el apoyo de Brasil y los demás países megadiversos en lo que tiene que ver en la realización de la COP16 en el mes de octubre aquí en Cali y asimismo reiteramos la importancia que representa para Colombia la participación del presidente Lula en este evento", apuntó Murillo.
Por su parte, Lula ha invitado a Petro a participar en la Cumbre de líderes del G20 que se celebrará en Río de Janeiro el 18 y 19 de noviembre.