La Décima Séptima Brigada del Ejército Nacional, en colaboración con otras unidades de seguridad, ha ejecutado una serie de operaciones contra el grupo armado organizado Clan del Golfo en la región de Urabá y el departamento del Chocó. Estas acciones, enmarcadas en el Plan de Campaña Operacional Ayacucho, han resultado en la captura de cinco individuos y la incautación de armamento y dinero en efectivo. La primera operación, llevada a cabo por el Gaula Militar Urabá y la Policía Nacional, culminó con la detención de una mujer conocida como alias "Yuli" en el barrio Buenos Aires de Turbo, Antioquia. Según las autoridades, "Yuli" era requerida por los delitos de lavado de activos y contrabando, y se le atribuye la gestión de rentas ilícitas por aproximadamente 3,2 millones de dólares para la estructura Roberto Vargas Gutiérrez del Clan del Golfo.
En una segunda acción militar, desarrollada en el municipio de Apartadó, Antioquia, las fuerzas de seguridad capturaron en flagrancia a dos sujetos por los delitos de fabricación, tráfico y porte de armas. Durante el operativo, se decomisó material bélico que incluía pistolas, escopetas, proveedores y cartuchos de diferentes calibres. Adicionalmente, se incautaron 25 millones de pesos en efectivo. Las autoridades señalan que estos individuos presuntamente pertenecen al componente criminal de la Subestructura Carlos Vásquez, también vinculada al Clan del Golfo. Esta operación pone de manifiesto la continua presencia de grupos armados ilegales en la región y los esfuerzos de las fuerzas de seguridad para contrarrestar sus actividades.
La tercera y última operación se llevó a cabo en el corregimiento Cuchillo Blanco, ubicado en el municipio de Belén de Bajirá, departamento del Chocó. En esta acción, tropas del Batallón de Infantería N.° 46 apoyaron diligencias de allanamiento y registro. Gracias a labores de inteligencia, se logró ubicar y capturar a dos sujetos más. Uno de ellos, conocido con los alias de "El Mocho" o "Blade", según las autoridades, contaba con un historial delictivo de 10 años y se le señala como el cabecilla principal del componente criminal de la Subestructura Carlos Vásquez del Clan del Golfo. Se le atribuye la coordinación del cobro de extorsiones al gremio ganadero de la región. En el momento de su captura, "El Mocho" se encontraba acompañado por quien las autoridades identifican como su escolta. Esta operación demuestra la complejidad de las estructuras criminales en la zona y los desafíos que enfrentan las fuerzas de seguridad en su desarticulación.
Durante la captura de "El Mocho" y su presunto escolta, las autoridades incautaron una pistola, un proveedor, cartuchos, radios, teléfonos celulares, una nómina de la zona ganadera y una motocicleta. Estos elementos podrían proporcionar información valiosa para futuras investigaciones sobre las actividades del Clan del Golfo en la región. Los cinco individuos capturados en el conjunto de estas operaciones fueron puestos a disposición de las autoridades competentes para su judicialización. El Ejército Nacional ha manifestado su intención de continuar con este tipo de operaciones para combatir los factores de inestabilidad presentes en estas regiones del país y generar un ambiente de seguridad para sus habitantes. Estas acciones reflejan la estrategia de las fuerzas de seguridad para desarticular las estructuras criminales y reducir su impacto en las comunidades afectadas.