El Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia anunció que el gobierno de Estados Unidos reanudará, a partir del viernes 31 de enero, las actividades de la sección consular de su embajada en Bogotá y la emisión de visas.
La suspensión de estos servicios se originó debido a que Gustavo Petro autorizó y después se negó a aceptar la llegada de migrantes colombianos deportados desde territorio estadounidense el domingo 26 de enero en la madrugada, lo que provocó un impasse diplomático, ante la reacción del presidente Donald Trump, quien condicionó a que se recibieran los migrantes para poder restablecer los servicios suspendidos.
En un comunicado oficial, la Cancillería resaltó la importancia del trabajo conjunto para mantener abiertos los canales de comunicación diplomática. “Destacamos el trabajo mutuo por el mantenimiento de los canales diplomáticos de interlocución entre dos Estados que son socios estratégicos en el hemisferio”.
El restablecimiento de los servicios consulares ocurre tras negociaciones entre ambas naciones, lo que permite retomar los trámites de visado para los ciudadanos colombianos que buscan viajar a Estados Unidos.
La Cancillería reafirmó su compromiso con la protección de los derechos de los ciudadanos colombianos, tanto dentro como fuera del país. “La garantía de derechos, el interés nacional y la dignidad de nuestros ciudadanos sigue y seguirá siendo una de nuestras prioridades”, señaló el Ministerio en su pronunciamiento oficial.
Las relaciones diplomáticas entre Colombia y Estados Unidos son de vital importancia, no solo por asuntos migratorios, sino por ser socios estratégicos a lo largo de décadas, incluso, algunos diplomáticos e internacionalistas afirman que el episodio de mayor polémica entre ambas naciones fueel reciente, por la salida en falso de Petro al no recibir inicialmente los deportados que al final de cuentas son ciudadanos colombianos.