La Comisión de Regulación de Energía y Gas, junto con el Ministerio de Minas y Energía, ha puesto en marcha una serie de medidas dirigidas a enfrentar la crisis energética que atraviesa el país por las condiciones climáticas adversas. Estas acciones buscan asegurar que el sistema energético sea confiable y sostenible en medio de la sequía.
Entre las medidas adoptadas, se evaluará el nivel de los embalses y la oferta de energía. Este proceso implica comparar el agua almacenada con una proyección conocida como senda de referencia, la cual es establecida para garantizar que haya suficiente agua en los embalses durante las temporadas secas.
Si los niveles de los embalses se acercan a la senda de referencia y no se activan las señales del cargo por confiabilidad en el mercado energético, el Centro Nacional de Despacho determinará la cantidad de energía que debe almacenarse y en qué embalses, priorizando las plantas hidroeléctricas más eficientes.
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El sistema también está preparado para hacer uso de generación térmica y fuentes no convencionales de energía renovable en caso de que la generación hidroeléctrica no sea suficiente. A su vez, se realizará un monitoreo constante de la situación energética para ajustar las medidas según la evolución de los niveles de los embalses.
El Ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, señaló que “el conjunto de medidas tiene como propósito mantener la capacidad de generación energética del país en condiciones críticas de baja hidrología, como las que se presentan debido a la crisis climática.” Estas acciones anticipadas buscan gestionar de manera eficiente los recursos energéticos del país.