Rodrigo Lara Restrepo es un abogado y político colombiano que, nacido en Neiva, lleva en la sangre la capital colombiana al ser la ciudad que lo vio crecer en sus primeros ocho años de vida, edad en la que tuvo que irse del país tras el asesinato de su padre, Rodrigo Lara Bonilla, entonces ministro de Justicia.
Es nuevo en su aspiración a la Alcaldía de Bogotá, una ciudad de grandes retos que él mismo define en entrevista con Hassan Nassar como «la pobre viejecita», por ser una ciudad extraordinaria con uno de los ecosistemas más fantásticos del mundo a tan solo 15 kilómetros de distancia y en la cual es imposible aburrirse.
Cuando el director de Revista Alternativa, Hassan Nassar, le preguntó sobre qué tanto podrían catalogarlo como un político de la élite que está dentro de la centralización del poder, Lara respondió a corazón abierto que no la ha tenido fácil en la vida. Mencionó que estuvo quebrado pero le han enseñado a luchar desde pequeño y por esa razón hizo un negocio minero, pagó sus deudas, se fue a dirigir uno de los gremios más importantes del país y volvió a la política agachando la cabeza. Además de eso abrió su oficina de abogados donde llevaba los procesos de las cuatro empresas más grandes del país en las que resultó ganador de los casos.
Foto: Hansel Vásquez, Revista Alternativa
Lara habló duro, dijo que existía mucho político zángano, acostumbrado a que le den todo, y que por ejemplo no sabía a qué se dedicaba Carlos Fernando Galán, lo que sí sabía era que Germán Vargas lo manipulaba por ser débil. Otro de los nombres puestos sobre la mesa fue el de Diego Molano a quien calificó de ser usado como pararrayos para decir que «ese es el uribista». Uno a uno barrió con los nombres de todos los candidatos.
Respecto a la innegable inseguridad que azota a Bogotá, hizo una escandalosa afirmación: «yo acabo con ese problema en un año». ¿Lo logrará? No se pierda la entrevista completa.