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Gustavo Petro

La encrucijada

“La situación jurídica de Nicolás Petro salpica directamente al presidente y a su entorno más cercano, entre ellos a Ricardo Roa, quien fue el gerente de campaña y hoy es el presidente de Ecopetrol, un tema muy sensible por la importancia que tiene la petrolera y sus negocios en el exterior”

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La confesión de Nicolás Petro de que sí ingresaron dineros irregulares a la campaña, pone en serios aprietos la legitimidad del gobierno. Para los analistas esto es apenas la punta del Iceberg

La detención realizada por la Fiscalía General de la Nación de Nicolás Petro, primogénito del presidente de la República, acusado de lavado de activos y enriquecimiento ilícito, ha generado en el país un terremoto político de proporciones impredecibles.

El escándalo escaló aún más, cuando después de una semana de su detención y ante las pruebas contundentes del fiscal del caso, Nicolás Petro decidió llegar a un principio de acuerdo a cambio de su libertad.

El precio: confesar el ingreso irregular de dineros a la campaña presidencial en la Costa Atlántica y su colaboración inmediata para establecer el manejo de dineros oscuros, provenientes de un exnarco que pagó una larga condena en Estados Unidos y dos poderosos empresarios, que han sido fuertemente cuestionados por la forma como han logrado apoderarse de multimillonarias obras públicas.

Su abogado, David Teleki, en entrevista con Alternativa, señaló que Nicolás Petro (véalaaquí) tenía ahora un compromiso de “contar todo” lo que había pasado con los dineros que le dieron para la campaña presidencial en la Costa. “Tiene la información. Sabe lo que pasó, con quiénes se reunió, quiénes hicieron los aportes y esa información será corroborada por la Fiscalía”.

El presidente Petro rechazó las denuncias sobre dineros de narcos en la campaña en Yopal.

A fondo

Pero ese “contar todo” tiene tanto de largo como de ancho. La Fiscalía que hoy tiene la sartén por el mango en el caso de Nicolás Petro, no va a quedar conforme con unos simples señalamientos. Tampoco con pruebas de oídas.

El fiscal Mario Burgos, que es considerado uno de los más eficientes del ente acusador y que ha tenido el manejo de casos tan complejos como el asesinato del fiscal paraguayo, Marcelo Pecci, quiere llegar al fondo de este asunto y determinar qué tanto sabían los directivos de la campaña presidencial, del ingreso de esos dineros que no fueron reportados en la rendición de cuentas ante el Consejo Nacional Electoral.

Pero también quiere saber qué compromisos se adquirieron con el exnarco Samuel Santander Lopesierra y el hijo del contratista Alfonso “El Turco” Hilsaca, investigado por nexos con el paramilitarismo.

La situación jurídica de Nicolás Petro salpica directamente al presidente y a su entorno más cercano, entre ellos a Ricardo Roa, quien fue el gerente de campaña y hoy es el presidente de Ecopetrol, un tema muy sensible por la importancia que tiene la petrolera y sus negocios en el exterior.

Ricardo Roa, presidente de Ecopetrol y exgerente de la campaña del presidente Gustavo Petro.

En lo político

Pero el tema no sólo está en el plano jurídico. La gobernabilidad del presidente, con tan sólo un año de gobierno, será muy compleja. La oposición comenzó a jugar sus cartas y elevó una serie de denuncias ante la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes.

El Consejo Nacional Electoral también pidió revisar el patrimonio de Roa e investigar si la campaña violó los topes establecidos por la ley en materia de financiación.

Pero no sólo el debate se centra en estas dos orillas. La detención y confesión de Nicolás Petro, tomó debilitado políticamente al Gobierno en el Congreso. La coalición con liberales, conservadores y la U, es cosa del pasado. Los verdes, cada vez más lejos, porque no les gusta el olor nauseabundo de la campaña presidencial. Mientras tanto, el Gobierno perdió el pulso para nombrar presidente del Senado, igual ocurrió en comisiones clave para tramitar las reformas.

La gobernabilidad en los próximos tres años será compleja. Como ocurrió hace 28 años. Pero la diferencia con Samper es que tenía unos escuderos de primera línea que manejaban muy bien los hilos del Congreso, con un equipo de asesores de Casa de Nariño que le permitieron sobrevivir a los cuatro años de gobierno.

A eso hay que sumarle las elecciones de gobernadores y alcaldes, que están a la vuelta de la esquina y que enfrentan una convulsionada situación de orden público en más de 360 municipios como lo denunció el defensor del Pueblo.

“Hay una situación mucho más compleja y complicada para el Gobierno y tiene que ver con sus reformas sociales que se tramitan en el Congreso de la República”.

Hilos sueltos

Como en los combates de boxeo, los golpes comienzan a llover de todas partes. Y la campaña presidencial ha comenzado a mostrar serias fisuras.

Una denuncia realizada por la unidad investigativa de Noticias Caracol titulada “El capo y la campaña”, es otra de las posibles irregularidades de ingresos no reportados.

El noticiero denunció que un narco conocido con el alias de “El sobrino”, habría hecho aportes a la campaña en Yopal, Casanare, así como de haber financiado varios eventos electorales. De inmediato el presidente Petro se vino lanza en ristre contra el noticiero y negó dichos aportes. Igual lo hicieron los dirigentes de la campaña.

Otro golpe fuerte es la investigación que hay en curso sobre los constantes viajes a Caracas, Venezuela, de la exniñera de la entonces jefa de Gabinete. Todavía falta por saber realmente cuánta plata se perdió y si está relacionada con los 15 mil millones de pesos a los que hizo referencia el hoy exembajador Armando Benedetti que ha dicho “esta boca es mía” para referirse a toda esta situación donde él era uno de los protagonistas de la elección Petro presidente.

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