Hace un año se presenció un espectáculo político poco visto en el Congreso de Colombia, la bancada oficialista decía apoyar a la senadora Angélica Lozano pero querían que fuese Inti Asprilla y entre bambalinas apareció un viejo conocido que se llevó el premio mayor y de paso una grave acusación más tarde, Iván Name.
La división en el partido Verde se ahondó más que nunca y este 20 de julio del 2024 año parece repetirse en la Cámara de Representantes cuando la presidencia es disputada por la disidente petrista Katerine Miranda, una recurrente admiradora del presidente en el pasado, pero quien desde hace algún tiempo no gusta de las formas y las maneras de gobernar de Petro y su combo y los constantes señalamientos de corrupción.
Miranda tiene 38 años, es politóloga, estudios de especialización en Cultura de Paz, Cohesión Social y Diálogo Intercultural de la Universidad de Barcelona y llegó al mundo de la política de la mano de Antanas Mockus y del exsenador John Sudarsky. Desde el 2010 está en el Congreso haciendo parte de la UTL de Sudarsky y luego hizo campaña y ganó su curul en el 2018 como Representante a la Cámara por la circunscripción de Bogotá, repitió en el 2022 y volvió a obtenerla.
En las últimas horas se mantiene firme en su búsqueda de la polémica presidencia de Cámara que en manos de Andrés Calle dejó muchos interrogantes e investigaciones por su supuesta relación con el clan de la UNGRD de Sneyder Pinilla y Olmedo López.
El otro contrincante es un boyacense que se vende como la fórmula ideal para una relación armoniosa entre Congreso y Gobierno, mensaje que de antemano, ya indica más, que el lápiz que permanente sostiene en la mano y con el cual se identifica con Petro.
Jaime Raúl Salamanca tiene 44 años, es de profesión contador público y cuenta especializaciones en Gobierno y Gerencia Territorial y Gestión Regional de Desarrollo. Llegó al Congreso en el 2022y antes fue dos veces diputado de Boyacá y una vez aspirante a la gobernación del mismo departamento
Salamanca tiene el apoyo de la bancada del Pacto Histórico desde donde dicen es "necesario y urgente"que sea escogido como presidente de la Cámara de Representantes para la legislatura 2024-2025, la más crucial de todas en el gobierno Petro, la clave para definir que legado queda aprobado por el contrario, que errores dejará a su sucesor. Ya ha pasado antes y no es de extrañar que suceda lo mismo.
Miranda o Salamanca, sea cualquiera de los dos, tiene una dura labor por delante: lidiar con la Casa de Nariño, la oposición, reformas no queridas y antetodo la duda de "mil millones de pesos", supuestamente entregados a su antecesor dentro de un entramado de corrupción que apenas empieza a hacerse público y que podría convertirse en tal vez, un robo al erario sin precedentes.
