Con la aceleración de su programa ‘Valle Invencible’, la gobernadora Clara Luz Roldán busca devolverle al departamento su ritmo de desarrollo y su esplendor.
“Resiliencia y berraquera es lo que corre por el ADN de los vallecaucanos”, expresa un líder cultural de la región. Y ello parece ser cierto porque, a pesar de que 2021 fue uno de los años más atroces en la historia del Valle del Cauca, hoy se siente un aire de optimismo.
En el segundo semestre del año la gente volvió a salir a las calles, se recargó de energía y respondió a compromisos importantes como los primeros Juegos Panamericanos Junior. También se volcó masivamente para disfrutar de eventos tradicionales como el Festival de Música del Pacífico Petronio Álvarez, el Festival Mundial de Salsa y la Feria de Cali, así como de las numerosas festividades de fin de año en los 42 municipios.
Es cierto que hay cifras que muestran el retroceso del departamento en temas como seguridad. La tasa de homicidios en Cali, por ejemplo, se incrementó en un 35% en 2021 cuando llevaba 10 años con tendencia a la baja.
El crecimiento económico en el primer semestre del año cerró en -3,8 % en comparación con el mismo periodo de 2020, según el Indicador Mensual de Actividad Económica del Valle del Cauca (IMAE). Y, además, fue uno de los departamentos más golpeados por la pandemia, según las cifras del Ministerio de Salud.
“Resiliencia y berraquera es lo que corre por el ADN de los vallecaucanos”, expresa un líder cultural de la región. Y ello parece ser cierto porque, a pesar de que 2021 fue uno de los años más atroces en la historia del Valle del Cauca, hoy se siente un aire de optimismo.
En el segundo semestre del año la gente volvió a salir a las calles, se recargó de energía y respondió a compromisos importantes como los primeros Juegos Panamericanos Junior. También se volcó masivamente para disfrutar de eventos tradicionales como el Festival de Música del Pacífico Petronio Álvarez, el Festival Mundial de Salsa y la Feria de Cali, así como de las numerosas festividades de fin de año en los 42 municipios.
Es cierto que hay cifras que muestran el retroceso del departamento en temas como seguridad. La tasa de homicidios en Cali, por ejemplo, se incrementó en un 35% en 2021 cuando llevaba 10 años con tendencia a la baja. El crecimiento económico en el primer semestre del año cerró en -3,8 % en comparación con el mismo periodo de 2020, según el Indicador Mensual de Actividad Económica del Valle del Cauca (IMAE). Y, además, fue uno de los departamentos más golpeados por la pandemia, según las cifras del Ministerio de Salud.
Sin embargo, los vallecaucanos le apuestan con todo a que 2022 sea el año del renacimiento. La gobernadora, Clara Luz Roldán, asumió el propósito de fortalecer su plan de desarrollo Valle Invencible, para así lograr que su cumplimiento se traduzca en resultados positivos para la región.
Alternativa: Gobernadora, el 2021 fue quizás uno de los años más difíciles para el departamento. ¿Cómo terminó para los vallecaucanos?
Clara Luz Roldán: Fue un año de un trabajo intenso, por la reactivación económica. Nos tocó esforzarnos más para pasar la página de los momentos difíciles marcados por la pandemia, la ola invernal, y los efectos de los bloqueos y del vandalismo durante el Paro Nacional. No nos detuvimos en ningún momento para llegar a los vallecaucanos con soluciones, garantizar los alimentos, avanzar en el desarrollo de proyectos de infraestructura clave y continuar con las convocatorias del programa Valle INN destinadas a apoyar con incentivos a los pequeños empresarios y a los emprendedores dispuestos a recuperar sus negocios y a generar los empleos que tanto necesitábamos. Nos encontramos a unos ciudadanos receptivos y, cuando vamos a distintos rincones, sentimos el optimismo y la esperanza para seguir avanzando.
¿Cuáles son para usted los logros más destacables de su gestión en esta coyuntura?
Hemos tenido logros en distintos sectores. Una de nuestras prioridades ha sido el desarrollo económico y recuperar la dinámica del departamento. Hemos invertido más de $56.000 millones en la reactivación de pequeños negocios a través de la entrega de incentivos. Por ejemplo, con el fondo Valle INN Municipios, modelo del trabajo articulado entre los municipios y la Gobernación, en la segunda y la tercera fase impactamos más de 3.000 unidades de negocios para recuperar 25.000 empleos en 40 municipios.
¿En qué se avanzó en materia de infraestructura?
Tenemos avances en proyectos estratégicos como la vía Cali-Candelaria, la vía Cali-Yumbo, y ya 94.000 habitantes del norte del departamento cuentan con el puente Omar Torrijos, que conecta a Roldanillo con La Unión. Adelantamos una gestión importante que hoy permite que sea una realidad la Malla Vial del Valle del Cauca, que trae una inversión de $1,2 billones y más de 40.000 empleos para la región. Y pronto veremos el inicio de las obras de mantenimiento con Vías del Samán, que beneficiará al norte del departamento. Y debo sumar a todo lo anterior otro gran logro, que nos ratificó como el departamento deportivo de América. Fuimos los anfitriones de los primeros Juegos Panamericanos Junior, el primer evento multideportivo con público en el mundo después de la pandemia.
Usted ha hecho una gran apuesta por el deporte y la cultura como alternativas para la recuperación del departamento, ¿pero cree que las iniciativas de este tipo son suficientes para restablecer el ritmo de desarrollo que necesita la región?
El deporte y la cultura siempre serán alternativas de suma importancia para nuestros niños y jóvenes, porque afianzan sus valores y los alejan de vicios y situaciones de riesgo. A cambio, les dan disciplina y les enseñan el respeto y el trabajo en equipo. Recibir a más de 3.500 deportistas de 41 países fue algo maravilloso porque nos dejó un gran legado con las nuevas figuras del deporte en el continente. Nos movilizamos para su realización y nos quedan escenarios deportivos para que otros niños y jóvenes se preparen.
Y sí considero que invertir en nuestros niños y jóvenes, quienes liderarán el departamento en un futuro no tan lejano, es importante. Por otro lado, con el estallido social, reconocimos como justos muchos de los reclamos que expresaron los jóvenes y ratificamos que el trabajo que realizamos desde el comienzo del mandato es fundamental. Adelantamos a través de nuestra Escuela de Liderazgo una capacitación importante en empoderamiento, liderazgo y control social; eso permite que haya ciudadanos que comprendan cómo funciona el Estado y cómo es nuestro trabajo y, de esa manera, realicen control y veeduría. Por supuesto que es una forma de avanzar.
Una de las mayores preocupaciones de la gente es la crítica situación de seguridad del departamento. ¿Qué ha hecho para recuperarla?
Este es un desafío permanente y hacemos las inversiones y el trabajo que nos permiten asegurar una vida tranquila para los vallecaucanos. Inauguramos el Centro de Gestión de Emergencias, modelo en el país, para que desde allí se articulen acciones en pro de la seguridad; invertimos $45.000 millones y desde este centro tenemos 161 cámaras funcionando; así mismo, se entregaron cuatro drones a la Policía y hemos otorgado 200 motocicletas adicionales, 100 para Cali y 100 para el Ejército. Puedo decirle que no hemos ahorrado recursos para fortalecer la capacidad operativa de nuestra fuerza pública. Por supuesto, es un trabajo articulado con la Nación. Un ejemplo es la intervención especial ejecutada en Buenaventura con más de 2.000 hombres que hacen presencia en el territorio. Gracias a ello se han efectuado 250 capturas, nueve de ellas corresponden al cartel de los más buscados.
¿Y qué se está haciendo para que menos jóvenes caigan en la delincuencia común, el vandalismo, el sicariato y el narcotráfico?
Con inversión social, con capacitación y con empleo. Es lo que nos hemos propuesto para alejarlos de situaciones que ponen en riesgo su integridad y que frenan su progreso. A través de talleres y capacitaciones hemos impactado a 7.855 jóvenes de los diferentes municipios para fortalecer sus competencias. Gracias a una alianza con el Instituto de Educación Técnica Profesional de Roldanillo (INTEP), más de 2.700 jóvenes han obtenido la doble titulación como bachilleres, técnicos o tecnólogos.
Hemos desarrollado estrategias para la generación de empleo con las convocatorias Valle INN y los diferentes programas en los que un 30 % de los recursos van dirigidos a los jóvenes. Con Valle INN Barberos, para citar uno de los más destacados, hemos llegado a más de 300 jóvenes de Cali, Jamundí y Palmira para que, a través de este oficio, emprendan y generen empleo. Es un trabajo intenso. Tenemos 1.573 jóvenes vinculados a la Gobernación como monitores, gestores y en las distintas dependencias. A esto se suma la inversión en recreación y deporte. A veces parece insuficiente, pero realmente el impacto es muy importante.
¿Valle INN es hoy la gran fuente de empleo para el departamento?
Sí, así es. Además de las ya mencionadas, hemos abierto convocatorias como Valle INN Mascotas, Valle INN Víctimas, Valle INN Reincorporados, Valle INN Civismo, Valle INN Micronegocios Buenaventura, Valle INN Comunas y Valle INN Invima. A través de secretarías como Agricultura, Mujer y Desarrollo Social, contamos con programas para entregar capital semilla a emprendedores… ¡En fin! Cuando empezó el 2021 dijimos que sería el año de la reactivación, y en eso nos enfocamos pese a las circunstancias.
¿Cuál es la estrategia para resucitar a Cali y, sobre todo, para devolverles la esperanza y la tranquilidad a sus habitantes?
Cali es el Valle. Allí también hemos aportado con inversión social, a través del mejoramiento de infraestructura deportiva y recreativa, que ha beneficiado a los caleños en las comunas, con espacios biosaludables. Contribuimos con diferentes programas a través de Indervalle, con actividades culturales y con reactivación económica a través de nuestras convocatorias Valle INN. En Cali la comunidad ha recibido con mucho entusiasmo Valle INN Comunas, con la que nos proponemos apoyar más de 2.000 unidades productivas en 18 comunas, eso significa más de 16.000 empleos entre directos e indirectos.
Problemas como los que se han mencionado suelen ahuyentar la inversión. ¿Qué se está haciendo con la Cámara de Comercio de Cali y los diferentes gremios para devolverles la confianza a los inversionistas?
Desde el primer día de mi mandato, la unión ha sido un principio de trabajo, algo esencial, y lo hemos logrado. Cuando nos sorprendió la covid-19, la unión de esfuerzos nos permitió prepararnos para enfrentar algo desconocido. Juntos, lideramos la Gran Alianza por la Reactivación del Valle del Cauca, con 30 entidades de 5 sectores estratégicos, para recuperar el tejido empresarial y productivo afectado por la pandemia. Los procesos que hemos visto nos entusiasman para seguir adelante.
A nivel personal, ¿cómo ha logrado enfrentar la crítica situación del departamento y atender al mismo tiempo su delicada situación de salud?
Este es un ‘Valle Invencible’: nos caemos, nos limpiamos las rodillas y seguimos adelante. Y en mi vida personal siempre he tenido esa premisa; ocurrió cuando me dijeron que tenía linfoma no Hodgkin folicular. Por supuesto, eso genera incertidumbre, pero soy una mujer de fe y Dios me ha acompañado toda mi vida. Lo hizo cuando les permitió a los médicos encontrar el tratamiento y luego decir que estaba curada. Gracias a él, pudimos continuar este trabajo que me encomendaron los vallecaucanos.
¿Volverá a ser el Valle del Cauca el departamento con medalla de excelencia que fue otrora?
Somos un “Valle Invencible” y así lo decimos cada día para que no quede duda de que somos valientes, aguerridos y no bajamos la guardia. Fuimos el primer lugar en el mundo con un evento deportivo con asistencia. Eso muestra el valor de este departamento, que es capaz de hacer grandes cosas. El 2022 será un año para ratificar que el desarrollo es total para el Valle del Cauca.