Los hijos del líder político colombiano Manuel Cepeda Vargas, asesinado en 1994, hicieron un llamado el viernes a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) para que tipifique definitivamente la persecución contra el partido de izquierdas Unión Patriótica (UP) como genocidio político.
La petición la hicieron el senador Iván Cepeda y su hermana María con motivo del 30 aniversario del asesinato de su padre, quien era senador de la UP cuando fue asesinado por sicarios en una calle de Bogotá, el 9 de agosto de 1994.
Esta solicitud "busca que la justicia reconozca el asesinato de Manuel Cepeda, junto con miles de otros casos, como parte de un intento sistemático por exterminar y eliminar de la vida política a la Unión Patriótica y al Partido Comunista", indicó en un comunicado Iván Cepeda, senador del Pacto Histórico.
"Este genocidio se ha perpetrado durante décadas en Colombia, y en algunos de sus aspectos, sigue impune", agregaron los hijos de Cepeda Vargas.
Con motivo del trigésimo aniversario del asesinato de Cepeda Vargas hoy se le rindió un homenaje en la Cancillería en cumplimiento de la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CorteIDH), que determinó la responsabilidad del Estado en su ejecución.
La CorteIDH condenó en 2010 al Estado colombiano por el asesinato del congresista, crimen declarado como de lesa humanidad en mayo pasado por la Fiscalía.
La UP nació en 1985 como parte de un intento de acuerdo de paz del entonces presidente Belisario Betancur con la guerrilla de las FARC, pero en los años siguientes la formación fue víctima de un genocidio por el que en marzo de 2020 la JEP la acreditó como víctima de crímenes de agentes del Estado.
Al menos 5.733 miembros de este partido colombiano de izquierdas fueron asesinados o desaparecidos hasta mediados de la década del 90, entre ellos los candidatos presidenciales Jaime Pardo Leal (1987) y Bernardo Jaramillo Ossa (1990), según la JEP.