El 4 de diciembre por la noche me embarqué en una aventura junto a la maison Chanel. Recibí una invitación especial para ver su desfile Métiers d’art cuya sede para este año fue la ciudad de Manchester en el Reino Unido. Sin saber con claridad qué esperar (ya que es mi primera vez en este país), hice mis maletas pensando en no sufrir con el clima. Poco imaginaba yo que al otro lado existía un lugar tan vibrante.
Una ciudad que tiene en cada esquina una historia por contar y cuya urbe ha creado un legado cultural que es sencillo percibir sin mayor esfuerzo, solo al mirar por la ventana del hotel era posible ver cómo la ciudad es un debate constante entre lo nuevo y lo antiguo, entre las generaciones que se abren camino y el legado que recorren en el mismo.
Al entrar en mi habitación encontré una revista Chaos dedicada a Manchester. Un escrito fascinante contextualizando el porqué de Manchester como foco central para esta colección y los distintos momentos de la historia de la maison en donde la vida de Chanel y sus vivencias inglesas se entrelazaban en sus diseños.
Junto a estos escritos había también fotografías, percepciones y perfiles de las nuevas generaciones de creativos locales. Un estudio maravilloso de la “movida” de la ciudad y sus más fieles representantes.
Entre ellos me quedé con un perfil que me pareció sumamente interesante llamada Victoria Jane. Una joven que dirige su propio programa de R&B en la BBC llamado Soul Show, un espacio donde ha entrevistado y cultivado talentos maravillosos alrededor de este género musical convirtiéndola en uno de los tastemakers cruciales de la ciudad y por ello mismo, en invitada de lujo de Virginie y su equipo a la hora de aterrizar Chanel en Manchester.
Como Victoria había más perfiles de diversas áreas: las artes, el deporte y la música que hicieron parte de los invitados a este show.
Métiers d’art fue creado por Karl Lagerfeld en diciembre de 2002 para poder mostrar de manera abierta los verdaderos saberes que existían dentro de la maison. Una de las grandes misiones de Chanel ha sido salvaguardar estos saberes, preservarlos y darles un valor con el objetivo de garantizar su permanencia en el tiempo.
En un mundo que consume imágenes en la misma velocidad en la que respira, el show me recordó que vale la pena tomar el camino largo. Vale la pena devolverse en la vida (al igual que Virginie con las bandas sonoras de Manchester que claramente fue lo que marcó una época de su vida) vale la pena buscar los contextos, investigar, conversar.
Llegar a puntos más profundos por el simple valor del encuentro, de la estimulación del ejercicio creativo, de entender que al contar una historia podemos hacerlo de diversas maneras y que en este show a través de los saberes de la Maison la historia gritaba Manchester.
El desfile fue un evento que marcó por completo el highlight de la temporada en la ciudad. Una propuesta que inspirada en el Manchester de los 60 y 80, captura con sutileza la juventud rebelde de aquella época, un retrato de esos lads con algo de picardía y humor sobre la cultura británica cuyos tweeds inspiraron tanto el imaginario creativo de Mademoiselle.
Color, música, fútbol y piezas elaboradas con conciencia y maestría hicieron parte de esta propuesta de CHANCHESTER la fusión de una cultura inspiradora dentro de una ciudad que habla por sí sola y que al ritmo de New Order, Oasis, The Smiths y Joy Division nos regresan a al punto de partida por excelencia en Chanel: la cultura.
Creo con pasión absoluta que siempre que la cultura sea celebrada, los saberes no morirán y en ese sentido Chanel y Métiers d’art continuarán siendo un ejemplo a seguir. Una meta bonita para comunidades que trabajan con maestría ancestral como las nuestras.
Celebrar el saber hacer dentro de nuestra industria es, y debería ser nuestra misión principal en cualquier contexto, entendiendo que a nivel local el impacto que esto genera siempre será mucho mayor de lo que podemos cuantificar.
Tres días de caminar por calles pequeñas pintorescas y culturales, de cantar con camisetas rojas con el número 5 en la espalda Glory glory man united en el Old Trafford, —ganando 2 a 1 debo decir—, de recorrer los pasos de The Smiths y otros jóvenes que al igual que ellos encontraron un lugar seguro en las artes y el Salford Lads’ Club y rematar con la muestra más cercana de lo que amamos y conocemos: la moda.
Gracias Chanel por esta experiencia inolvidable, CHANCHESTER sin duda se irá a un lugar profundo y especial en mi corazón en donde pareciera por unos instantes que al creer en las artes, todo es posible.
