Gravedad en las amenazas apunta a políticos locales y vínculos con bandas criminales, según el mandatario municipal.
Tras el consejo extraordinario de seguridad en Tuluá por el asesinato del concejal Eliecid Ávila, el alcalde Gustavo Vélez hizo una denuncia impactante, sugiriendo que políticos locales podrían estar detrás del crimen y vinculados a bandas criminales como La Inmaculada.
El alcalde informó que tanto él como otros funcionarios y concejales han recibido amenazas de políticos presuntamente aliados con bandas criminales. Reveló que el concejal asesinado había sido amenazado directamente, indicándole que si se interponía en la elección del nuevo personero municipal, sería asesinado, y esa amenaza se cumplió.
Vélez enfatizó que este es un asunto complejo que está en manos de la Policía Nacional y las autoridades competentes. Subrayó que las amenazas no solo están relacionadas con asuntos políticos, sino también con la elección de funcionarios y concejales, todos expuestos a riesgos.
El alcalde advirtió que las amenazas persisten y apuntan a funcionarios y otros concejales. Denunció la existencia de una "organización político-criminal" conformada por políticos aliados con estructuras criminales que buscan imponer condiciones en contra de la libertad y la democracia en el municipio.
En un llamado a la acción, Vélez espera la intervención de la Fiscalía y destaca que ya se tienen nombres de personas vinculadas a actividades políticas pero aliadas con criminales. Además, anunció una orden para militarizar Tuluá, con el respaldo del Batallón de Alta Montaña, el Gaula y el Ejército, con el objetivo de garantizar la seguridad y combatir la creciente complejidad de la situación.
