En el marco de la audiencia de medida de aseguramiento contra Olmedo López, Sneyder Pinilla y Luis Eduardo López Rocero, los abogados defensores han solicitado que sus clientes sean recluidos en una guarnición militar. Esta petición se basa en la preocupación por la seguridad de los imputados, quienes han sido fundamentales en revelar un esquema de corrupción.
Gustavo Moreno, abogado de Pinilla, expresó: "Vamos en la misma línea, en procura de la verdad. Los testigos hoy imputados han sido claves para que se debele un entramado de corrupción que le preocupa al país". Moreno enfatizó la importancia de garantizar la vida de los imputados, argumentando que "la cooperación no puede ser una sentencia de muerte".
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La defensa sostiene que, según el Código Penitenciario, los imputados, en su calidad de funcionarios públicos, deben ser recluidos en un patio especial para funcionarios. Moreno argumentó: "Usted no puede recluir al testigo con la persona que usted está señalando, con la persona a la que va a ir a llevar a juicio como testigo, es absurdo".
Además, los abogados han revelado que sus clientes y ellos mismos han sido objeto de amenazas y presiones. Moreno confirmó: "Sí, eso será objeto de los debates de la evidencia, han sido objeto de amenazas, de constreñimiento para que se abstengan de declarar, de presiones". La defensa espera que estas circunstancias sean consideradas por el juez de control de garantías al momento de tomar una decisión sobre la medida de aseguramiento.
