En las últimas horas, Alfredo Saade, quien ganó reconocimiento en el país durante la pre-contienda electoral de 2022 por el Pacto Histórico, y que recientemente ha sido señalado de presuntamente haber recibido pagos injustificados por servicios en la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo, se ha visto en la necesidad de defenderse contra otras acusaciones que lo señalan como un falso pastor, y que según él, le hacen por su ideología política progresista y "ser aliado de Gustavo Petro".
La polémica surgió tras la publicación de una contundente carta de la Asociación de Ministerios del Evangelio (ADME), donde expresaron que Saade carece de reconocimiento como pastor a nivel nacional y que no lo consideran representante ni interlocutor válido del pueblo cristiano ante el Gobierno Nacional.
Saade se ha defendido en X: "Todos aquellos que se dejaron llevar por la injuria y la calumnia les saldrá cara su maledicencia". Además, dijo que siempre sostuvo no ser pastor porque todavía no se había recibió como tal.
En cuanto a las acusaciones, Saade afirmó que su nombre fue hecho trizas y que buscará resarcimiento por los daños causados. Adelantó que, junto con su abogado, llevará el caso ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos para exponer la situación.
El exaspirante político también hizo hincapié en la gravedad de las acusaciones, destacando el peligro que representa: "Este señalamiento es peligroso porque podría ser el exterminio por parte de la ultraderecha recalcitrante, de los pastores progresistas", subrayó Saade.
