La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) pidió la protección del río La Miel, en el Eje cafetero, y la intervención en un osario colectivo donde podría haber desaparecidos del conflicto armado colombiano.
Así se dictaminó en una audiencia pública a las medidas cautelares que protegen 36 cementerios y una isla en el Eje Cafetero y el Magdalena Medio caldense, durante la cual la magistrada Reinere Jaramillo indicó que se dictaron medidas cautelares para proteger los derechos a la verdad y memoria de las personas que, según ha constatado la JEP con informes de la Fiscalía, fueron arrojadas al río La Miel por grupos paramilitares.
La JEP ordenó también la intervención forense del cementerio de San Agustín de Samaná, en el departamento de Caldas, en la que será la primera intervención a un osario colectivo.
En este camposanto, según este organismo creado por el acuerdo de paz de 2016, "se llevaban prácticas inadecuadas en la custodia de cuerpos no identificados e identificados sin reclamar que, en muchos casos, fueron trasladados irregularmente al osario donde se mezclaron las estructuras óseas, situaciones que ponen en riesgo el derecho a la búsqueda que tienen las familias de las víctimas".
Para intervenir el río, la JEP ordenó a varios organismos consolidar un protocolo arqueológico forense que permita "trabajar de manera articulada en la búsqueda de personas dadas por desaparecidas en el marco del conflicto armado en la zona de influencia del Proyecto La Miel II".
Y en los próximos cuatro meses se deberán trazar "rutas de memoria" con placas, símbolos y otros íconos para honrar a las víctimas de desaparición forzada que fueron lanzadas a este río, afluente del Magdalena, o desaparecidas en sus alrededores. EFE