Hoy, 4 de julio, iniciaron las esperadas negociaciones entre los transportadores de carga y el Gobierno Nacional en el departamento de Nariño. La mesa de diálogos, que cuenta con la presencia del Gobernador Luis Alfonso Escobar y la participación de la Procuraduría y la Defensoría del Pueblo como garantes, busca alcanzar acuerdos que mejoren las condiciones de seguridad y la infraestructura vial en la región, con posibles implicaciones a nivel nacional.
El gobernador Escobar ha hecho hincapié en la necesidad urgente de levantar los bloqueos viales para permitir el progreso efectivo de las negociaciones. En sus propias palabras: "Estamos a la espera de que la Asociación Colombiana de Camioneros (ACC) cumpla el acuerdo de habilitar el paso de vehículos particulares y de transporte público represados en los puntos de bloqueo para iniciar el diálogo social sobre sus peticiones". Esta declaración subraya la tensión existente entre la voluntad de negociar y la persistencia de las acciones de protesta.
También le puede interesar: Seis soldados murieron después de caer en un campo minado
Las demandas de los camioneros, que han mantenido un paro durante varios días, se centran en mejorar las condiciones de seguridad no solo en Nariño, sino también en el departamento del Cauca y a lo largo de la vía Panamericana. Además, los transportadores buscan mejoras significativas en la infraestructura vial que faciliten su labor. Estas peticiones reflejan preocupaciones de largo plazo en el sector del transporte de carga en Colombia.
Mientras se desarrollan las negociaciones, la situación en las vías de la región sigue siendo compleja. La Personería de Pasto ha informado sobre el levantamiento del bloqueo en la vía que conecta Pasto con el puente internacional de Rumichaca, tras tres días de obstrucción. Sin embargo, otras rutas clave permanecen bloqueadas, lo que ha tenido un impacto significativo en el suministro de combustibles y ha provocado especulación en los precios. Esta situación ha llevado al gobernador Escobar a rechazar firmemente los bloqueos, enfatizando la necesidad de mantener las vías abiertas para el funcionamiento normal del departamento.
También le puede interesar: "No nos llame Autodefensas. Tenemos familias": gremio de motociclistas increpa a Hugo Ospina, líder de taxistas
La escasez de combustibles se ha convertido en un problema adicional que agrava la situación en Nariño, a pesar de los esfuerzos realizados para garantizar su ingreso a la región. Este desabastecimiento no solo afecta al sector del transporte, sino que tiene repercusiones en la vida cotidiana de los habitantes del departamento y en la actividad económica local.