La principal diferencia entre una cuenta de ahorros y una cuenta para ahorrar radica en su enfoque y funcionalidad:
Cuenta de ahorros tradicional:
Es comúnmente utilizada para realizar transacciones diarias, como transferencias, compras y retiros en cajeros automáticos.
Aunque se llama "cuenta de ahorros", su principal función no es necesariamente el ahorro, sino la gestión diaria de las finanzas.
Suele ofrecer facilidades para acceder a los fondos de manera rápida y sencilla.
Ejemplo: la Cuenta de Ahorros Costo $0 de Banco Falabella, que permite gestionar finanzas fácilmente a través de su aplicación y realizar transacciones sin costo en la red de cajeros servibanca.
Cuenta para ahorrar con rentabilidad:
Está diseñada específicamente para fomentar el ahorro y proporcionar rentabilidad sobre el dinero depositado.
Suele ofrecer tasas de interés más atractivas que las cuentas de ahorro tradicionales.
Su objetivo principal es hacer crecer los ahorros de manera efectiva a través de la acumulación de intereses.
Ejemplo: la Cuenta de Ahorros PAC de Banco Falabella, que brinda una solución integral para la gestión del dinero y ofrece intereses diarios con tasas de hasta el 8,00% efectiva anual.
En resumen, mientras que la cuenta de ahorros tradicional se centra en la conveniencia y la accesibilidad para las transacciones diarias, la cuenta para ahorrar con rentabilidad está diseñada específicamente para impulsar el crecimiento económico a través del ahorro e inversión, ofreciendo tasas de interés atractivas y opciones para hacer crecer los fondos depositados.