Tomas de pantalla de algunas de las cuentas de los gobernadores que publicaron en sus redes sociales el escudo de Colombia.
La situación en el país en materia de seguridad empeora y el ministro de Defensa, Iván Velásquez demuestra una inoperancia total desde su cartera y lo que es aún peor: un silencio y desconocimiento aterrador de la situación. De nada ha servido que el propio presidente Gustavo Petro haya ordenado reanudar acciones contra el -Clan del Golfo’ después de haber ordenado casi que detener todas las operaciones contra ellos, las disidencias, el ELN y demás grupos desde el 7 de agosto del año pasado cuando se posesionó como mandatario.
El mensaje de Libertad y Orden del escudo se convierte en el SOS que lanzan los gobernadores para pedir que cuanto antes la Casa de Nariño despierte y tome cartas en el asunto. Siete meses después de la llegada al poder de la administración Petro el panorama es totalmente incierto y solo se perciben medidas y medidas para privilegiar bandas criminales y grupos al margen de la ley. Para los ciudadanos comunes y corrientes, absolutamente nada.
Ahora el peligro y la situación ha llegado a tal punto que la Procuraduría, la Registraduría y los propios gobernadores ya están viendo cómo peligran las elecciones regionales programadas para octubre de este año, situación que regresa al país más de 20 años atrás cuando grupos como las FARC, ELN y las autodefensas tenían sitiado al país y decidían dónde podían hacer elecciones y dónde no, así como imponer candidatos a punta de fusil.