El mundo ya ha comenzado a enamorarse de las Phryges, las carismáticas mascotas de los Juegos Olímpicos de París 2024. Estos gorros frigios de color rojo vivo, símbolo histórico de libertad para los franceses, llevan consigo una profunda carga histórica y cultural que ahora se verá reflejada en el evento deportivo más importante del mundo.
Los gorros frigios, además de representar la libertad, son emblemas de la revolución y la República Francesa. Su presencia en grandes acontecimientos históricos de Francia, como la construcción de la catedral de Notre-Dame en 1163, la Revolución de 1789 y la edificación de la Torre Eiffel, resalta su importancia. Incluso estuvieron presentes en los Juegos Olímpicos de París 1924, hace exactamente 100 años.
Estas simbólicas mascotas están destinadas a ser protagonistas en los próximos Juegos Olímpicos, añadiendo una capa extra de significado a los ya icónicos Juegos de París 2024. Con su presencia, se busca no solo celebrar la historia, sino también inspirar una revolución a través del deporte, promoviendo valores de libertad y fraternidad.
El Comité Organizador de París 2024 ha elegido las Phryges precisamente por su capacidad de conectar el pasado con el presente, utilizando la historia como un puente hacia el futuro. Estas mascotas no solo simbolizan la rica herencia cultural francesa, sino que también representan un llamado a la acción para los atletas y espectadores de todo el mundo.