Las autoridades de la Franja de Gaza, controladas por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), han elevado este miércoles a cerca de 37.400 los palestinos muertos y a más de 85.500 los heridos a causa de la ofensiva militar desatada por Israel contra el enclave tras los ataques ejecutados el 7 de octubre por el grupo islamista y que se saldaron con unos 1.200 muertos y cerca de 250 secuestrados.
El Ministerio de Sanidad gazatí ha señalado que hasta la fecha se han confirmado 37.396 muertos y 85.523 heridos, incluidos "24 mártires y 71 heridos" en tres "masacres" perpetradas por las fuerzas israelíes durante las últimas 24 horas "contra familias en la Franja de Gaza".
Además, ha pedido a "las familias de los mártires y los desaparecidos en la guerra en Gaza" que entreguen información sobre sus seres queridos para completar el balance de víctimas y ha subrayado que hay un número indeterminado de víctimas "bajo los escombros y en las carreteras". Las autoridades gazatíes han cifrado en cerca de 10.000 los desaparecidos.
Por su parte, la Alcaldía de Rafá ha denunciado que "la ocupación está destruyendo de forma sistemáticamente la ciudad y sus campamentos" y ha agregado que el objetivo de Israel tras "destruir" el paso fronterizo con Egipto es "hacer que la Franja de Gaza sea inhabitable", según ha informado el diario 'Filastin', vinculado de Hamás. "El Ejército de ocupación ha destruido más del 70 por ciento de las instalaciones e infraestructura de la ciudad", ha señalado.
Israel ha incrementado durante las últimas semanas sus bombardeos contra Rafá y lanzó el 6 de mayo una ofensiva terrestre contra la ciudad, inicialmente centrada en la parte oriental de la ciudad y extendida posteriormente a su zona centro, incluida la toma del lado palestino del paso con Egipto, lo que supuso la suspensión de operaciones humanitarias a través del cruce fronterizo.
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) afirmó el lunes que sólo 65.000 palestinos siguen refugiados en Rafá, que hace cerca de un mes y medio contaba con 1,4 millones de personas, la mayoría de ellas llegadas tras huir de otros puntos del enclave a causa de la ofensiva de Israel.