El próximo 11 de julio, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, se dirigirá a Nueva York para participar en una sesión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. El propósito de esta visita es presentar un informe detallado sobre los avances y desafíos en la implementación del acuerdo de paz firmado en 2016 con la extinta guerrilla de las FARC. Durante su intervención, Petro expondrá la situación actual del proceso de paz y planteará la necesidad de extender el periodo de implementación, actualmente establecido en 15 años.
La propuesta del gobierno colombiano de ampliar el marco de implementación surge tras una evaluación exhaustiva del progreso alcanzado desde la firma del acuerdo. El canciller Luis Gilberto Murillo expresó la preocupación del ejecutivo al respecto, señalando que "si juzgamos por el nivel de implementación de estos 8 años de firmado el acuerdo, queda muy claro que no vamos a poder cumplir con el acuerdo en los 15 años que se plantearon en el plan marco de implementación y que probablemente va a requerir una extensión".
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Ante el Consejo de Seguridad de la ONU, el presidente Petro no solo presentará un balance de la situación, sino que también propondrá medidas concretas para acelerar la implementación del acuerdo. Entre estas propuestas, destaca la solicitud de extender el marco de implementación por al menos cinco años adicionales.
El gobierno colombiano ha identificado la necesidad de implementar medidas de emergencia para avanzar en la ejecución del acuerdo de paz. Estas medidas buscan abordar los rezagos acumulados y acelerar el proceso en áreas críticas. El canciller Murillo profundizó sobre este punto, explicando que "lo que estamos planteando y la recomendación es poder hacer evidente relacionada con las barreras estructurales, la falta de condiciones estructurales para la implementación, aunque se ha avanzado en algunos aspectos, persisten estas barreras". implementación del acuerdo.
El gobierno propone que, en una segunda fase y en acuerdo con las partes involucradas, se definan medidas de choque para abordar las barreras estructurales que han impedido una implementación más rápida y efectiva del acuerdo. Esta estrategia busca revitalizar el proceso de paz y asegurar que los compromisos adquiridos en 2016 se cumplan de manera integral.