En medio de la grave situación provocada por la escasez de agua que enfrenta el país debido al bajo nivel de los embalses, el presidente del Congreso, Iván Name, ha tomado acciones inmediatas para contribuir a mitigar la crisis.
Name ordenó la suspensión del suministro de agua y energía en el Capitolio Nacional durante tres horas diarias, en un esfuerzo por enfrentar la difícil coyuntura que atraviesa Colombia.
Ante la preocupante escasez de agua que afecta al país, el presidente del Congreso, Iván Name, ha anunciado la adopción de medidas para contribuir al ahorro de recursos en medio de la crisis. La decisión de Name responde al bajo nivel de los embalses que surten de agua a Bogotá y otras ciudades, situación que ha generado alarmas y llamados a la solidaridad y responsabilidad colectiva.
"Teniendo en cuenta la situación de los embalses que surten los servicios de acueducto de Bogotá y la posible afectación del fluido eléctrico en el país, impartimos la instrucción a la señora directora administrativa del Senado de la República", declaró Name.
Si bien no se especificó el horario exacto en el que se implementarán estas medidas, se espera que la Dirección Administrativa de la corporación defina estos detalles en las próximas horas. Name subrayó la importancia de que el Congreso de la República asuma su responsabilidad en medio de la difícil situación generada por la escasez de agua.
"Esta situación nos toca a todos y tenemos el deber de tomar las medidas necesarias para ayudar a resolverlas", enfatizó el presidente del Senado. Además, aseguró que la Dirección Administrativa comunicará a todas las oficinas de los senadores y demás dependencias sobre esta medida, con el objetivo de promover la colaboración de todos los sectores en la mitigación de la crisis.
Esta medida anunciada por Name se suma a otras acciones implementadas para enfrentar la escasez de agua en la capital. De hecho, el jueves los trabajadores del Capitolio podrán laborar desde sus casas debido a la falta de suministro de agua durante 24 horas, como parte del plan de racionamiento por zonas implementado por el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán.
